
Dos coches bomba mataron el lunes al menos a dos personas en la capital de Daguestán, volátil provincia en la región rusa del Cáucaso Norte, donde grupos armados combaten a la insurgencia islamista. El presidente de Chechenia responsabiliza del ataque a la educación recibida por los sospechosos en EEUU
Coches bomba, atentados suicidas y combates son comunes en Daguestán, que es el centro de una insurgencia arraigada en las dos guerras post soviéticas contra separatistas rebeldes en la vecina Chechenia.
Los investigadores dijeron inicialmente que al menos ocho personas habían muerto en la capital de la provincia, Majachkala, pero las autoridades que se ocupan del cumplimiento de la ley apuntaron a que los muertos eran dos y que había más de 20 heridos.
Ambas explosiones se produjeron cerca de la sede central del servicio de alguaciles y las bombas fueron activadas al parecer por control remoto, dijo el comité investigador federal, que depende del organismo estatal ruso.
Restos de un coche destrozado podían verse cerca del edificio, que quedó acordonado por la policía.
El principal sospechoso de los atentados contra el maratón de Boston, en Estados Unidos, Tamerlan Tsarnaev, vivía en Daguestán con su familia hace una década y visitó la región el año pasado.
La visita de Tsarnaev, que fue abatido por disparos de la policía tras los atentados del 15 de abril, donde murieron tres personas y resultaron heridas 264, está siendo estudiada por investigadores estadounidenses que buscan vínculos con los insurgentes.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha ordenado que las autoridades que se ocupan del cumplimiento de la ley se aseguren de que los insurgentes no atacarán los Juegos Olímpicos de Invierno 2014 el próximo febrero en la localidad de Sochi, a orillas del mar Negro, que está cerca del Cáucaso Norte.