Un sólo partido le ha servido a Ricky Rubio para consagrarse en la NBA. Su debut con los Minnesota Timberwolves es el soñado por cualquier jugador que desembarca tan pronto en el baloncesto de Estados Unidos.
A pesar de que su equipo perdió ante los Okhlahoma City Thunder (100-104), se anotó seis puntos, cinco rebotes y cuatro asistencias en los 26 minutos que estuvo sobre la cancha.
Pero no solo esto. Ricky también fue el protagonista de la que ha sido elegida la mejor jugada de la jornada.
El base español asiste a su compañero Williams, quien encesta de espaldas y nos regala un mate sensacional.