
Comprarse casa en Silicon Valley, la meca de los gurús de la tecnología, es literalmente imposible o por lo menos totalmente prohibitivo. La llegada masiva de las mayores corporaciones de tecnología del mundo al sur de la Bahía de San Franciso, en el Estado de California, no pasó desapercibida para banqueros, gestores de hedge funds y otra decena de profesionales que se alimentan del sector tecnológico. El sector inmobiliario tampoco pasó por alto los astronómicos sueldos que empresas como Google, Microsoft o Facebook pagan a sus empleados y a día de hoy, alquilar una habitación se ha convertido en todo un dolor de cabeza.
Tan es así que Alphabet, la matriz de Google, ha dado un paso al frente para tratar de solucionar el problema -ni siquiera sus empleados pueden permitirse pagar alquileres a precio de oro-. La compañía de Mountain View está a punto de cerrar la comprar de 300 unidades de apartamentos modulares -las casas prefabricadas de toda la vida- para levantar un edificio que sirva de vivienda a corto plazo para los trabajadores, según han confirmado ejecutivos de la compañía a The Wall Street Journal.
Factory, la empresa de construcción propietaria de los apartamentos modulares, ha desvelado que el acuerdo rondará los 25 o 30 millones de euros, de acuerdo con el fundador y director de la empresa, Rick Holliday. Luces y sombras de emprender en Silicon Valley: fácil acceso a financiación pero un alto coste de vida.
"Cualquier cosa que pueda ayudarnos a avanzar con un mayor conocimiento de cómo podemos producir viviendas de manera más efectiva es algo que nos interesa", explicó el director de diseño y construcción de Google, John Igoe. "Estamos absolutamente seguros de que funcionará", añadió.
Un reto en mayúsculas
Lo cierto es que el reto es mayúsculo, ya que hasta ahora todos los grandes proyectos de construcción modular -con los que se reducen los costes de edificación en un 20 o 50%- en lugares como California o Nueva York han fracasado. La burocracia ha sido el principal escollo, aunque no el único al que se ha enfrentado una tecnología todavía en desarrollo.
Además, los expertos reconocen que el ahorro final no ha sido tan alto como se esperaba en un principio en comparación con las técnicas de construcción tradicionales. Aunque creen que el ahorro se disparará a medida que mejore la técnica.
Facebook no ha querido ser menos en esta carrera y ya se ha comprometido a planificar y diseñar 1.500 unidades en Menlo Park, de las cuales el 15% serán clasificadas como viviendas asequibles. El proyecto aún se encuentra en una fase preliminar, lejos de ponerse en marcha. Un portavoz dijo que la compañía está considerando comprar viviendas modulares y afirmó apoyar el proyecto de Holliday, así como lo haría con "todo lo que tiene el potencial de acelerar la construcción de viviendas en el área de la Bahía".
Por el momento, Holliday ha conseguido en un proyecto anterior ahorrar gracias a la construcción modular unos 700 dólares al mes en concepto de alquiler gracias a la reducción de costes en la construcción.
Alquilar o comprar, un imposible
Los datos son preocupantes Los alquileres de San Francisco han aumentado casi un 50% desde 2010, mientras que los precios de las viviendas han aumentado un 98% desde el comienzo de la crisis en 2009. Una oleada de burbujas inmobiliarias amenaza medio mundo: los precios son más altos que en 2007.
"Hemos llegado a un punto de inflexión donde los costes son tan altos que la gente está desesperada por encontrar una solución", lamenta la directora de la facultad del Centro Terner de Innovación en Vivienda y ex comisionada federal de vivienda, Carol Galante.