
Los pequeños operadores de telecomunicaciones no podrán concurrir en la primera subasta de frecuencias de 5G debido a las condiciones económicas que el Gobierno ha incluido en las bases de la licitación. En concreto, la orden ministerial que recoge el pliego de requisitos técnicos de la licitación -que comenzará a mediados del próximo julio- exige a los futuros candidatos unos ingresos anuales de más de 90 millones de euros en cualquiera de los tres últimos ejercicios.
Con esta decisión, el Ejecutivo no solo reduce el ámbito de las concesiones del nuevo espectro a los grandes jugadores del sector (Telefónica, Orange, Vodafone, MásMóvil, Euskaltel), sino que también impide que determinadas empresas ajenas al negocio de las redes puedan concurrir con intenciones especulativas. En ese caso, de forma implícita, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital ha cerrado la puerta a posibles firmas de capital riesgo interesadas en comprar espectro para luego vender con plusvalías.
Para ello, el Ejecutivo demanda cierta "solvencia profesional", de forma que las empresas deberán acreditar su experiencia en el negocio de las redes y servicios de comunicaciones electrónicas durante los tres últimos años. Asimismo, se requiere de las mismas compañías que alguno de sus contratos ganados en el ámbito de las telecomunicaciones haya superado un valor anual de 42 millones de euros. En el supuesto de que pretenda concurrir un operador de telecomunicaciones de reciente creación, se demandarán los criterios de solvencia económica, financiera y técnica a cualquiera de sus socios o participantes en proporción al porcentaje accionarial que asuma en el licitador.
Exclusiones
De todo lo anterior se desprende que quedan excluidos de la futura subasta de frecuencias tanto los operadores móviles virtuales (OMV), como los pequeños cableros locales que ofrecen servicios de conectividad en sus respectivos ámbitos territoriales.
El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital anunció el pasado viernes la convocatoria de la subasta de la banda de frecuencias 3,6-3,8 GHz, especialmente diseñadas para las comunicaciones móviles 5G. Para ello saca al mercado un total de 200 MHz, distribuidos en 40 bloques de 5 MHz cada uno, todos ellos de ámbito nacional.
En dicha convocatoria se fija en 2,5 millones de euros el precio de salida de cada bloque, por lo que el objetivo mínimo de recaudación arranca en 100 millones. Ese importe de salida ha resultado muy bien valorado por las grandes telecos. También recibió parabienes del sector la distribución del pago del importe de la subasta en 20 plazos anuales, para así coincidir con el periodo de duración de la concesión. "Esta medida favorecerá de manera muy relevante la inversión y la extensión de las nuevas redes 5G", indican fuentes de la Secretaría de Estado para la Sociedad de la Información y la Agenda Digital que lidera José María Lasalle.
La orden ministerial por la que se aprueba el pliego de condiciones para la subasta de las frecuencias baratas de 5G concede la prioridad en la elección de las concesiones al licitador ganador que haya ofrecido un mayor precio por MHz en el conjunto de las concesiones demaniales en las que tenga la mayor puja vigente al final de la última ronda. En el caso de que se produzca un empate entre varios licitadores ganadores -por haber ofrecido el mismo precio-, se resolverá la igualdad mediante un sorteo público.
Los operadores interesados podrán presentar sus solicitudes para participar en la subasta hasta el 29 de junio de 2018. El proceso de rondas y pujas comenzará a mediados del próximo julio, siempre antes del 20 de ese mes. Además, las telecos que participen en la subasta no podrán superar los 120 MHz, de forma que las compañías que ya tienen 40 MHz en la banda de 3,4-3,6 GHz deberán conformarse con un máximo de 80 MHz.
Por otra parte, el Gobierno se compromete a preservar los principios de neutralidad tecnológica y de servicios. De esa manera, los adjudicatarios de los nuevos recursos radioeléctricos podrán explotar los bloques de frecuencia adjudicados con cualquier tecnología siempre que los titulares de los mismos comuniquen previamente sus intenciones a la Secretaría de Estado para la Sociedad de la Información y la Agenda Digital.
Más de 600 operadores
El Registro Mercantil español tiene censadas más de 600 empresas que reconocen algún tipo de actividad propia de los operadores de telecomunicaciones, incluido telefonía o el mantenimiento de servicios de Internet. Por su parte, el Registro de Operadores de comunicaciones electrónicas de la CNMC dispone de más de 8.000 registros distintos, aunque de entre ellos apenas dos centenares merecen la plena consideración de teleco.
Un nuevo proceso más rápido
El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital pretende acelerar el proceso de la subasta de las frecuencias de 36-3,8 GHz a través de la letra pequeña de las condiciones. En concreto, el Gobierno fija que cada porcentaje de incremento en las pujas sobre el precio vigente sea de 15, 25 o 30%, frente al 1, 3 y 5% de subastas anteriores. De esa forma, los licitadores reducirán el número de rondas, ya que rápidamente alcanzarán el precio máximo deseado por cada compañía. Como en otras ocasiones comparables, la licitación se desarrollará con el mecanismo de subasta simultánea ascendente de múltiples rondas, siempre a través de medios electrónicos. Asimismo, cada licitador comenzará el proceso con tres dispensas. Esa facultad permite a cada compañía continuar pujando o mantener su elegibilidad en la siguiente ronda, aunque no haya realizado ofertas. La subasta concluirá cuando en una ronda no se reciban nuevas pujas para cada bloque de frecuencias.