Amazon se encuentra en pleno proceso de explorar alternativas que le permitan ahorrar en el transporte. Así lo ha demostrado su última patente, que deja ver un auténtico método de envíos que, aunque parece sacado de ciencia ficción, podría ser realidad dentro de varios años.
La idea del gigante minorista es desplegar un dirigible que sobrevuele las ciudades, para que, a modo de almacén aéreo, sirva de base de cientos de drones que repartirán pedidos a los clientes que viven en en grandes núcleos poblacionales.
Según ha revelado CB Insights, la patente fue presentada el pasado mes de abril y la compañía sostiene que con este sistema de entregas los envíos podrían ser despachados en cuestión de minutos.
La idea de Amazon es establecer los dirigibles a más de 45.000 pies, una altura suficiente para lanzar los drones desde ella gracias a la gravedad y los motores de éstos sólo se encenderían en el último tramo del recorrido para lograr llegar al destino final ahorrando toda la energía posible.
Después de que el dron completase la entrega, éstos no tendrían que volver al dirigible sino que volarían hasta un transbordador cercano que sería el encargado de encagarse en cada aeroestato. Y es que las aeronaves contarían con una autonomía de unos 30 minutos dde vuelo, con lo que en ocasiones no sería suficiente para volver al zepelin.
Precisamente este año ha sido el primero en el que la compañía que dirige Jeff Bezos ha conseguido completar un pedido con un dron. La entrega fue llevada a cabo en Cambridge (Reino Unido) y tardó 13 minutos, eso sí, se hizo en condicidones de tiempo favorables y en mitad del campo, una operativa que la compañía se verá obligada a ir mejorando poco a poco en el futuro.
Patente de Amazon. 'CB Insights'.
