
La entrevista del recién elegido presidente Donald Trump a la cadena estadounidense CBS no ha dejado indiferente a nadie. El magnate, rodeado de su familia, atribuyó su victoria en los comicios al uso desenfadado de redes sociales como Facebook o Twitter durante la campaña electoral.
Trump, famoso por no callarse absolutamente nada, llevó a cabo una dura campaña de burlas e insultos a sus oponentes en redes sociales. Hasta tal punto llegó su efusividad, que sus asesores, días antes de las elecciones, le arrebataron el control de las mismas por miedo a que algún error pudiera apartarlo de la Casa Blanca.
No obstante, su llegada a la Casa Blanca le hará cambiar el tono de sus cuentas oficiales. "Voy a ser más moderado, si las uso voy a ser muy moderado. Es una forma moderna de comunicación. No debería haber razones por las que avergonzarse. Realmente creo que el haber tenido tanto poder en las redes me ayudó a ganar. Siempre estoy activo. Tengo una manía por defenderme", señaló.
Además, durante la entrevista habló de su principal rival, la demócrata Hillary Clinton y la campaña de publicidad -tanto tradicional como digital- que llevó a cabo durante las elecciones. "Creo que los medios sociales tienen más poder que el dinero que gastaron", dijo a la entrevistadora Lesley Stahl.
Habrá que esperar hasta el 20 de enero para saber si finalmente la postura moderada que defiende Trump será una realidad o no. De hecho, ya ha utilizado Twitter para atacar a quienes se manifestaron en su contra en las calles o a medios de comunicación como The New York Times.