La utilización de vídeos horizontales está quedando en desuso ante la irrupción de los vídeos verticales, puesto que este tipo de formato cada vez está acaparando un mayor éxito entre los usuarios tras su proliferación en plataformas como Snapchat o Twitter. Por esta razón, los medios digitales se han visto obligados a invertir en este formato visual e incorporarlo así en sus estrategias digitales.
El formato del vídeo vertical ha experimentado un notable crecimiento durante los últimos años. Según datos del analista Mary Meeker, en la actualidad los usuarios utilizan dispositivos orientados verticalmente en un 30% de las veces, frente a sólo un 5% en 2010. Esta situación ha provocado que varios editores comiencen a trabajar de manera activa en la producción de vídeos verticales.
El culpable de la popularización de este formato ha sido Snapchat. La red social de fotografía instantánea acoge un total de 7.000 reproducciones de vídeos al día, de las cuales la mayoría tienen una orientación vertical o también denominada de retrato. Esta red social ha impulsado la creación de vídeos verticales y pese a las críticas de los profesionales del vídeo, todo apunta a que este formato multimedia puede ser el futuro del vídeo.
Tanto los medios digitales como las agencias publicitarias están invirtiendo en este formato visual. Por ejemplo, el tabloide británico The Daily Mail ya está introduciendo estos vídeos en sus contenidos. "Estamos trabajando para que el 100% de los vídeos sean verticales, ya que nos encontramos ante un compromiso mucho mayor. El principal motivo es que los usuarios están más satisfechos", explica Jon Steinberg, directivo del medio.
La táctica del Washington Post
El diario estadounidense Washington Post es un claro ejemplo sobre cómo un editor debe invertir en formatos de vídeo vertical. El pasado mes de diciembre, el Post creó un nuevo reproductor de vídeo para que cuando el lector estuviera leyendo un artículo, el vídeo se desplazara por la web a medida que el lector va avanzando en su lectura. El objetivo de esta característica tiene que ver con aumentar las tasas de visibilidad, lo que supone mayores ingresos por publicidad.
En este sentido, aquellos editores que se resistan a incorporar los vídeos verticales en sus redacciones tendrán el riesgo sufrir un descenso de las tasas de participación así como la pérdida del público millennial. Como consecuencia de la fomentación del vídeo vertical que han llevado a cabo redes sociales como Snapchat o Twitter, ahora los editores están abocados a abrazar este formato visual, según informa theMediaBriefing.