
El negocio español de las telecomunicaciones constató ayer dos motivos para el optimismo en un sector que colecciona caídas de ingresos desde hace más de cuatro años. Según se desprende del informe trimestral que elabora la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el mercado de la banda ancha móvil y la industria audiovisual anotaron crecimientos de su facturación del 9,7 por ciento y del 3,2 por ciento, respectivamente, durante el segundo trimestre de 2014. Se trata de las dos únicas magnitudes favorables de un mercado deprimido especialmente por el declive de la telefonía fija (con caídas del 16,4 por ciento) y del móvil (20,9 por ciento).
La anterior evolución viene a justificar el desplome de los ingresos que sufren casi todos los operadores de telecomunicaciones, cuyo negocio disminuyó de forma generalizada en términos interanuales: Telefónica redujo sus ingresos el 10,1%; Vodafone el 16,1%; Orange el 8,6%; y Yoigo el 22%. Se escapa de esta tendencia bajista el operador Jazztel, que en el segundo trimestre de 2013 creció el 14,8%.
De la misma forma, los principales operadores de televisión en abierto, Mediaset y Atresmedia, repuntaron el 18,4 y el 7%, respectivamente. Ambas compañías se beneficiaron de la subida del 8,5% de la inversión publicitaria, con una facturación próxima a los 540 millones de euros.
Entre las conclusiones más relevantes del informe de la CNMC sobresale el cambio de poder en el negocio. A partir de ahora, la banda ancha para móvil ya aporta más ingresos que la de fijo, situación que promete no tener marcha atrás. De esa forma, la facturación por los datos móviles alcanzó los 889,34 millones de euros, frente a los 881,64 millones de la banda ancha fija.
Las redes de nueva generación (NGA) siguen ganando presencia en España. Así, según datos de finales del pasado junio, los accesos de NGA instalados superaron los 20 millones, repartido casi a partes iguales por la fibra óptica hasta el hogar (FTTH) y cable (Docsis 3.0). Ahora bien, el crecimiento de la fibra supera el 46,5% mientras que el del cable ronda el 1% en términos interanuales.