
Este fin de semana se ha presentado el primer dispositivo que permite imprimir fruta bajo demanda, resultado de una colaboración de la compañía británica Dovetailed con Microsoft. Para ello, la impresora 3D usa la técnica conocida en la gastronomía molecular como esferificación.
El dispositivo va combinando las gotas de gel, de diferentes sabores para crear la forma deseada. Se puede imprimir así una mora con sabor a fresa, o a manzana.
Esta impresora de comida no requiere conocimientos avanzados de informática o electrónica, y de hecho ha sido diseñada para el creciente mercado de los aficionados a la alta cocina hecha en casa.
La impresora "abrirá nuevas posibilidades tanto a los chefs como a los usuarios domésticos, permitiéndoles expandir las experiencias culinarias", asegura uno de sus creadores.
"Hemos reinventado el concepto de fruta fresca y bajo demanda", añade.