APPLE
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Steve Jobs estaría orgulloso del nuevo iPad, la tercera generación de tabletas de Apple que ha desvelado la compañía más valiosa del mundo. En el compendio de virtudes técnicas del capricho sobresale una novedad por encima del resto: el nuevo gadget entra por lo ojos, con una calidad de imagen que roza la perfección. Todo luce de forma espectacular, lo que es una excelente noticia para los usuarios y para los proveedores de contenidos. Esta nueva vuelta de tuerca tecnológica puede resultar poca cosa para los que esperaban algo mágico de la chistera de Apple, pero esto es lo que ahora toca. Pese al perfil continuista de la nueva niña bonita de la firma, la cotización de Apple salió fortalecida con máximos históricos registrados en la víspera de esta presentación. Minuto a minuto: así ha sido la presentación del nuevo iPad de Apple.
El gadget, que atiende simplemente por New iPad (ni iPad 3 ni ipad HD), llegará a las tiendas españolas el próximo 23 de marzo, con los siguientes precios en Estados Unidos: 499 dólares, el modelo de 16 GB WiFi; 629 dólares, el equipo de 16 GB Wifi y 3G; 599 dólares, el modelo de 32 GB WiFi; 729 dólares el equipo de 32 GB con WiFi y 3G. Los modelos con mayor capacidad de almacenamiento, de 64 GB, cuestan 699 dólares el WiFi y 829 dólares el de WiFi y 3G.
A grandes rasgos, el gadget mejora todo lo anterior con una pantalla con mayor resolución (2.048 x 1.536 píxeles, más de lo que el ojo humano puede distinguir) y cuatro veces más que la versión del iPad2. También sobresale por ofrecer una batería más generosa (capaz de trabajar durante 10 horas a pleno rendimiento), un procesador más eficaz (de doble núcleo A5), conectividad de acceso a Internet ultrarrápido (compatible con las redes LTE, con velocidades teóricas de hasta 100 megabits por segundo) y una cámara de cinco megapíxeles en sintonía con las prestaciones que ya abundan en el mercado. A lo anterior se puede añadir otra media docena de argumentos técnicos relacionados con nuevos programas, como tratamiento de fotos o composición de música.
Como también se esperaba, Apple mantiene su tradicional veto a todo lo relacionado con la navegación flash, algo de lo que se seguirán aprovechando comercialmente el resto de sus competidores.
La apuesta por el reconocimiento de voz, a través de la tecnología Siri instalada en los iPhones 4S, conquista ahora las tabletas, con un asistente virtual capaz de atender y obedecer las órdenes orales. Por ahora sólo comprende inglés, alemán, francés y japonés. Con este tipo de innovaciones, Apple avanza hacia la futura desaparición de los teclados, aunque para alcanzar ese objetivo todavía falta un larguísimo camino por recorrer. Apple también busca nuevas oportunidades de desarrollo para los servicios de videoconferencia, que no terminan de arrancar con el FaceTime del iPhone, y que podrían disfrutar de una segunda juventud a través de la nueva generación de tabletas de Apple. La compañía californiana no desveló en su presentación ningún complemento para el nuevo iPad, como protectores y fundas a la medida, objetos que tradicionalmente suelen generar pingües rendimientos comerciales a la industria auxiliar de Apple.
Salvo la resolución de la pantalla del nuevo iPad todo en el dispositivo resulta conocido, pero igualmente seductor. No falta el barniz de distinción que aplica la firma de Cupertino a todas sus creaciones. Muchos usuarios opinan que no basta con adquirir el último prodigio de Apple, sino que también apetece lucirlo. Algo de ese espíritu posiblemente se perderá con la estrategia de Apple de popularizar sus productos entre mercados que hasta ahora sólo podía suspirar de envidia. Ahora bien, la conquista de países en desarrollo aportará a la multinacional estadounidense el empujón definitivo para mantenerse en la cumbre desde la que ahora contemplan el mundo. Para ello, Apple rebaja los precios de su iPad 2, entre 399 dólares el de 16 GB WiFi y 529 la versión WiFi y 3G.
La presentación en sociedad del nuevo iPad, realizada en San Francisco y retransmitida vía satélite en Londres ante cerca de 200 periodistas de todo el mundo, colapsó las redes sociales con comentarios de todos los colores. Los seguidores más entusiastas de la marca, capaces de comprar a ciegas cualquier cosa con el sello de la manzana, apuntaron que la nueva tableta volverá a disparar los ingresos de una compañía que ya triplicó su facturación de los iPads en 2011 respecto al ejercicio anterior. Durante el último trimestre del año pasado, Apple vendió 15,4 millones de tabletas, lo que representa una cuota de mercado mundial del 58%.
Primera cotizada del mundo
La puesta en escena del nuevo iPad se produce en un momento especialmente dulce para Apple, compañía que en los últimos días se ha consolidado como la cotizada de mayor una capitalización bursátil, superior a los 500.000 millones de dólares (378.000 millones de euros). Su tesorería de casi 115.000 millones de dólares (87.000 millones de euros) convierte a la firma en la envidia de Wall Street. Los inversores llevan frotándose las manos desde que invirtieron el primer dólar en la empresa hace 24 años y no han dejado de hacerlo desde entonces.
Y eso que Apple no destina un centavo a dividendos desde hace años. Si lo hiciera, sería un maná. A modo de ejemplo, bastaría con que distribuyera 17.000 millones de dólares, un 15% del total de la caja que se espera para 2012, para encaramarse como la compañía que mejor remuneraría del Nasdaq 110, por delante de Paychex. Pero eso ahora sólo son meras especulaciones. De hecho, en el hipotético caso de que Apple destinara toda la caja para retribuir al accionista, la rentabilidad por dividendo sería del 27%, con un pago por acción de ¡123 dólares!
El pasado martes, los analistas de Barclays elevaron el precio objetivo de Apple hasta 710 dólares desde los 630 anteriores, al tiempo que reiteraron su consejo de sobreponderar. Por unas cosas o por otras, el banco concedía a la compañía de la manzana un potencial de subida del 33% respecto al cierre del pasado lunes. La misma opinión es compartida por otros analistas, últimamente espléndidos con la empresa que fundó Jobs.
La autoestima de Apple también está por las nubes, entre otros detalles, porque lidera el ránking de la revista Fortune de las 50 empresas más admiradas del mundo, con una media que roza el sobresaliente (8,42), por delante de Google, Amazon, Coca-Cola e IBM.
El resto de la industria ya sabe las fortalezas y debilidades de la tableta de Apple, líder del mercado, para responder a partir de ahora con sus respectivos mata iPads. Samsung no tardará en contraatacar con una tableta que posiblemente supere en prestaciones técnicas a las de Apple, como viene siendo costumbre desde hace dos años.
En el caso del fabricante coreano, su respuesta podría materializarse a través del tablet Galaxy S 3, que presumiblemente contará con una cámara de 12 megapíxeles, pantalla Super Amoled de entre 4,6 y 4,8 pulgadas y procesador de 1,5 GHz. Vender para comprarlo que es seguro es que el alumbramiento del iPad 3 revitalizará de inmediato el mercado de segunda mano de modelos de tabletas anteriores.
Según datos del sector, sólo en España se incrementaron este tipo de transacciones el 50% durante las últimas semanas, ante la certeza de que Apple cocinaba una versión mejorada de su iPad. La oportunidad puede resultar interesante para los usuarios que carezcan de una tableta de Apple y que no aspiren a lo más novedoso. La abundante oferta abaratará los precios de un producto que, por lo general, suele estar en buenas condiciones de conservación al tratarse de uno de los dispositivos más preciados del momento.
El fabricante aprovechó su presentación para actualizar algunas de las grandes cifras de la empresa. Entre ellas sobresale el hito de los 25.000 millones de descargas de aplicaciones a través de los más de 315 millones de dispositivos iOS (iPhones, iPad e iPod Touch). La oferta de 550.000 aplicaciones diferentes alojadas en el AppStore ha permitido a los desarrolladores de programas repartirse alrededor de 4.000 millones de dólares en los cuatro últimos años.
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