
El discurso del presidente del Parlament, Roger Torrent, en un acto solemne en el Colegio de Abogados de Barcelona (Icab) ha provocado que se levantaran de sus asientos y se apartaran momentáneamente, incluido el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC,) Jesús María Barrientos; el fiscal jefe de Cataluña, Francisco Bañeres, y la fiscal jefe de Barcelona, Concepción Talón, que han abandonado el acto.
Torrent había dicho poco antes que en los últimos meses hay una regresión de derechos y libertades fundamentales especialmente en Cataluña; ha añadido textualmente que hay presos políticos por delitos inexistentes; que la separación de poderes está en peligro; y ha elogiado la labor de la Comisión de Defensa del Icab.
En la mesa presidencial junto a Torrent han estado el ministro de Justicia, Rafael Catalá -que ha hecho su discurso después de Torrent-, y la decana del Icab, Maria Eugènia Gay, que ha abierto el acto.
En su intervención, Torrent ha criticado al poder judicial y ha afirmado que se vulneran derechos como la libertad de expresión, reunión, manifestación, intimidad y defensa, así como de los derechos políticos fundamentales.
Ha lamentado que "la voluntad de las urnas no se puede materializar" porque los tribunales a instancias del Gobierno central no lo permiten, y ha asegurado que hay presos políticos acusados de delitos inexistentes.
Y ha añadido que esta sesión solemne tiene lugar en un "contexto anómalo por la situación política" en las instituciones catalanas, intervenidas por el Estado, y por la situación de la Justicia.
Torrent ha mostrado preocupación por "la crisis del Estado de derecho" en dos cuestiones esenciales como son la separación de poderes y la garantía de los derechos fundamentales, citando al catedrático Javier Pérez Royo, que lamentaba una regresión a una situación predemocrática, según ha dicho el presidente.
Ha citado los ejemplos del rapero Valtonyc -condenado a tres años de cárcel- y casos de conversaciones de políticos que hablaban de poner o quitar fiscales y jueces, "o ministros que anticipaban decisiones judiciales antes de existir sentencias".
Además, ha cuestionado la separación de poderes y ha dicho que con ello "se pone en riesgo los derechos y libertades fundamentales".
Catalá: "Torrent se ha equivocado profundamente"
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha criticado que el presidente del Parlament, Roger Torrent, se ha "equivocado profundamente" al hacer ese discurso crítico con el poder judicial.
En declaraciones a los periodistas después del acto -en que el discurso de Torrent ha hecho levantar al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Jesús María Barrientos, y el fiscal superior, Francisco Bañeres, entre otros-, el ministro ha dicho que en un foro de este tipo "no tocaba" hacer política.
Ha explicado que él no ha abandonado su sitio por respeto al Icab pero que todos estaban muy "incómodos" porque se estaban haciendo afirmaciones falsas al decir ante jueces, fiscales y abogados que en España no hay estado de derecho.
Torrent: "Nunca dejaré de denunciar la situación de los diputados presos"
Torrent ha asegurado este sábado que la cámara vive una situación anómala y que continuará defendiendo los derechos de los 135 diputados y de las personas que les han votado: "Nunca dejaré de denunciar la situación de los diputados presos y exiliados hasta que estén en casa".
En un mensaje en su cuenta de Facebook, Torrent ha recordado que la libertad de expresión debe ser valida para "todo el mundo", después de que su discurso este viernes en el Colegio de Abogados de Barcelona (Icab) provocara la protesta de varios asistentes, incluido el presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, y el fiscal jefe de Cataluña, Francisco Bañeres, y la fiscal jefe de Barcelona, Concepción Talón, que abandonaron el acto.
"La libertad de expresión debe ser válida para todo el mundo. Eso incluye, evidentemente, aquellos que quieran expresar su desacuerdo con mis palabras abandonando el acto", aunque considera básico el respeto institucional, ya que, según él, la libertad de expresión se defiende cuando se ven y oyen cosas que no gustan.