La crisis ha agotado las cajas de las CCAA en España, lo que explica que las deudas globales del tercer trimestre hayan subido un 26,5% respecto a hace un año y que Cataluña (con una exposición de cerca de 30.000 millones) haya optado por colocar obligaciones anuales por 2.500 millones.
Paga más del 7%, nivel cercano a Grecia. El mercado cree que hay mucho riesgo, prueba de ello que Fitch ha rebajado el rating de la deuda a largo de A+ a A.