
La prima de riesgo de España ha llegado hoy a marcar los 140 puntos básicos, algo que no ocurría desde marzo de 2017, aunque ha concluido en 136 puntos. La italiana, por su parte, no está mucho mejor ya que ha llegado a alcanzar los 292 puntos y se encuentra en máximos de abril de 2013. El diferencial de la prima española frente a Italia también se ha elevado hasta máximos de enero de 2012 debido a que las ventas en Italia han sido mayores.
La incertidumbre política que atraviesa España tras la decisión del PSOE de presentar una moción de censura contra el Gobierno tras conocerse la condena al PP en el caso Gürtel se sumaba a las dudas que suscita la situación política en Italia.
Con todo, la prima de riesgo de España está muy lejos de los 638 puntos que llegó a alcanzar en julio de 2012, en el punto álgido de la crisis de deuda europea y que Mario Draghi cortó de raíz con su famoso discurso del "haré lo que sea necesario". La rentabilidad del bono español a 10 años se mueve hoy en la zona del 1,6%, también muy por debajo del 7,62% que tocó en aquellos días.
Los inversores han estado pendientes de los últimos movimientos políticos en Italia, donde el presidente de la república, Sergio Mattarella, ha encargado al economista Carlo Cottarelli la formación de un gobierno tecnócrata que, de no contar con la confianza del Parlamento, aboca al país a nuevas elecciones.
La prima de riesgo italiana sube hasta los 280 puntos básicos desde los 234 que marcó al cierre de ayer. En otros países de la periferia europea, como Portugal o Grecia, las primas de riesgo también crecen, hasta 189 y 415 puntos básicos, respectivamente.
El precio de los seguros de impago de deuda (credit default swaps), cantidad que se debe pagar para garantizar una inversión de 10 millones de dólares, se quedaba en 106.440 dólares para los de España y en 217.380 dólares para los de Italia.