
Una vez más, como es habitual por estas fechas, los feligreses de Berkshire Hathaway ponen rumbo a Omaha, Nebraska, donde el Oráculo de los inversores, el octogenario Warren Buffett, celebra junto con decenas de miles de fanáticos, accionistas, celebridades, periodistas y algún que otro curioso, su encuentro anual, que muchos consideran como el Woodstock del capitalismo.
Buffett, fiel a su devoción por la presentadora de la CNBC, Becky Quick, confesó durante una entrevista que su conglomerado sigue engullendo acciones de Apple, sumando 75 millones adicionales desde que arrancase el año a los 165,3 millones de títulos ya en cartera. Durante los dos últimos años, el multimillonario ha mostrado un apetito por la de Cupertino que acabó haciendo sombra a IBM, un valor que Berkshire ha eliminado completamente de su portafolio.
Pero a la espera de conocer más detalles este fin de semana, Berkshire también amplia su exposición en la economía a pie de calle. Entre aseguradoras como Geico y negocios de consumo como Daisy Queen o Fruit of the Loom, que no utilizan el poderoso nombre de su matriz, el conglomerado se ha convertido ya en un verdadero titán del negocio inmobiliario a este lado del Atlántico.
De hecho, su agencia inmobiliaria se posiciona ya como la segunda entidad más grande del país en estos menesteres, con mas de 1.330 oficinas a lo largo y ancho de Estados Unidos (franquicias de Berkshire Hathaway HomeServices) y más de 45.000 agentes inmobiliarios militando a favor de estas operaciones.
Berkshire Hathaway HomeServices generó beneficios el año pasado con 220 millones de dólares, por debajo de los 225 millones de dólares registrados hace un año, dado un aumento de sus gastos. Los ingresos crecieron un 23%, hasta los 3.500 millones de dólares.
Buffett entró en el negocio inmobiliario casi por accidente a comienzos del 2000, cuando compró MidAmerican, propietaria de HomeServices. A partir de entonces varias otras operaciones siguieron a esta adquisición.
Es por ello, como señala el Wall Street Journal, que se decidió ceder el nombre de Berkshire Hathaway HomeServices a las franquicias después de que la matriz de Buffett tomase una participación mayoritaria en 2012 en el negocio inmobiliario de Prudential.
El conglomerado de Berskhire Hathaway incluye alrededor de 60 empresas en múltiples sectores, desde aseguradoras, compañías ferroviarias y fabricantes de baterías. Su negocio inmobiliario, con sede en Minneapolis, fue una de las primeras operaciones de consumo de la matriz en incluir el nombre de Berkshire como marca, algo que se materializó en 2013.
En estos momentos, Buffett quiere que Berkshire Hathaway HomeServices siga creciendo, un objetivo donde la marca Berkshire es un activo preciado pero que a ojos del WSJ también conlleva riesgos. Una mayor exposición puede salpicar al conglomerado del Oráculo de Omaha, cuyos títulos acumulan una rentabilidad negativa en lo que llevamos de año del 1,45%.