
Da igual de qué generación se hable: el perfil del ahorrador español es muy similar con independencia de su edad. Si algo tienen en común los millennials (nacidos entre 1980 y 2000), la generación X (1961-1981) o los baby boombers (1946-1964) es que todos se consideran conservadores y se definirían a sí mismos como ahorradores en vez de como inversores. Pese a ello, España es el segundo país de Europa en el que la población se fija un objetivo de rentabilidad más elevado, superior al 6%.
La expectativa más alta la tiene la generación X, que se marca un objetivo de rentabilidad de casi el 8% (7,83%), a pesar de que el 71% se considera algo o muy conservador. Es una de las conclusiones que se extraen de los 900 sondeos que Legg Masson ha realizado en España como parte de una encuesta más amplia, a nivel global, en la que se han efectuado 15.300 cuestionarios en 17 países distintos.
Pese a que los rendimientos que esperan todos ellos son elevados, nunca inferiores al 6%, más del 30% de sus carteras está compuesta de activos líquidos y equivalentes, que son los que ofrecen menores retornos en la actualidad. En cuanto a la diversificación geográfica, otra de las conclusiones que se extrae es que aún cuesta invertir fuera de nuestro país, siendo los millenials los que menos reparos encuentran para hacerlo.
La crisis financiera… En el retrovisor
A pesar de que ha pasado una década de la crisis financiera de 2007/2008, 7 de cada 10 inversores españoles sigue estando influenciado por ella, independientemente de sus edades, inversiones y decisiones de ahorro. Aunque los que más presente la tienen a la hora de tomar sus decisiones de ahorro e inversión son los millennials.
"Teniendo en cuenta que la crisis financiera empezó hace diez años, es muy importante que comprendamos su influencia posterior en las decisiones de inversión de nuestros inversores millennials. Tres de cada cuatro (el 78%) encuestados afirmaron que la crisis les ha influido algo o mucho. El hecho de que tengan tanta exposición a activos líquidos podría ser una de las consecuencias a largo plazo de la crisis para estos inversores", señala Javier Mallo, responsable de Legg Mason para España y Portugal.
Pese a ello, los activos inmobiliarios sigue siendo uno de los favoritos de las tres generaciones, junto a la renta variable internacional.
La tecnología no suplanta al asesor financiero
Otra de las conclusiones que se extraen de esta encuesta es que la fuente preferida de los españoles para informarse a la hora de tomar sus decisiones de inversión sigue siendo el asesor financiero profesional, aunque la tecnología actúa cada vez más de complemento. La mayoría, en las tres generaciones, considera que el servicio personalizado nunca se podrá reemplazar con tecnología y que existen áreas en las que se necesita un experto, como en el asesoramiento fiscal.
Habrá jubilación pública
En cuanto a la jubilación, los objetivos que se marca cada una de las generaciones son de lo más variopintos: mientras que el de los millennials es en su mayoría jubilarse de forma anticipada, el de la generación X es disfrutar de unas rentas elevadas durante su jubilación y el de los baby boomers gastarse todo el dinero antes de morir. Pero si algo tienen en común todos ellos es que la mayoría dice estar muy preocupado sobre el nivel de rentas que tendrá durante la jubilación. Pese a ello, las tres generaciones creen que habrá pensión pública cuando se jubilen, también los millennials (66%). En concreto, dos de cada tres inversores millennials españoles consideran que podrán disfrutar de una pensión pública cuando se jubilen, mientras que el 27% cree que no.