Engie ha presentado hoy jueves los resultados anuales del ejercicio 2016 en los que, según Goldman Sachs, destacan, sobre todo, "los 200 millones que recortará en costes que las ganancias reportadas".
Los beneficios obtenidos han alcanzado los 2.477 millones de euros, ligeramente por encima de las estimaciones del consenso (2.426 millones) y un un 4,7% menos respecto al ejercicio anterior sin contar extraordinarios (2.600 millones de euros). La propia compañía ha declarado que para 2017 "se espera volver al crecimiento orgánico gracias al buen momento de los negocios estratégicos".
Esto ha sido celebrado por los inversores en el parqué galo, donde las compras han superado a las ventas y sitúan las acciones de Engie, a media sesión, como los más alcistas del Cac 40 con una revalorización que ha llegado a ser de casi el 7%, con lo que ha vuelto a los números verdes en 2017. De cerrar así, sería la mejor jornada bursátil para Engie desde septiembre de 2011.
Los analistas, de momento, están siendo precavidos con con sus estimaciones. Tan sólo tres casas de análisis han emitido nuevas recomendaciones sobre los títulos de Engie. Dos de ellas (Morgan Stanley y Bryan Garnier) han ratificado sus consejo de compra mientras que RBC Capital continúa sugiriendo a los inversores que mantengan posiciones.
Pese al importante rebote de Engie en bolsa, los expertos siguen anticipando un avance mayor a 12 meses vista, en concreto, hasta los 13,76 euros en los que sitúan el precio justo. Para alcanzar este precio debe revalorizarse todavía un 11% más.
El dividendo, sin cambios
De la misma forma que ha hecho en los últimos 3 años, la compañía repartirá entre sus accionistas en 2017 dos dividendos de 0,50 euros cada uno a cargo de las cuentas de 2016 y que, en conjunto, ofrecen una rentabilidad superior al 8% a precios actuales. El primero de ellos, se espera para la primera semana de mayo, tal y como lo ha venido haciendo en años anterior.