
No se sabe si primero fue la tónica o la ginebra, ni quién las mezcló para dar lugar al 'gin tonic', tampoco cuándo se les añadió la primera rodaja de limón, monda de naranja, bayas de enebro, lemongrass, cortezas de lima, pomelo o dragonfly, hojas de menta, palo de regaliz, pimienta negra, jengibre o nuez moscada... Lo que sí sabemos a ciencia cierta es que desde hace años está muy de moda y Fever-Tree lo está sabiendo aprovechar.
Este furor por el combinado ha llevado a las marcas de ginebra a multiplicarse, a disparar sus ganancias, a probar con sabores, olores y colores infinitos, pero también ha disparado las ventas de su "necesario" acompañante, la tónica.
En España se pasó de pedir un simple gin tonic con su típica Schweppes a pedir un gin tonic con (elija ginebra) y con (elija tónica), pero si bien en las ginebras los gustos difieren sobremanera, en la tónica existe un claro ganador, la Fever-Tree.
Pues bien, parece que esta tónica se ha puesto de moda no solo en España, sino que se debe emplear en los gin tonics de medio planeta, ya que, según ha publicado Bloomberg, su valor bursátil no ha parado de crecer.
Desde su debut en bolsa a finales de 2014, el valor de las acciones de la empresa británica encargada de la elaboración de Fever-Tree se han quintuplicado. De hecho, solo el pasado jueves, las acciones de la marca se dispararon un 14%, ya que la compañía anunció que sus resultados anuales sobrepasarían las expectativas de los analistas.
Esto contrasta con las acciones de los productores de ginebra Diageo y Pernod Ricard, cuyas acciones se han estancado debido a la proliferación de marcas y a un mercado que se debate, cada día más, entre las diferentes ginebras.