
Desde que Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), anunciara en el mes de enero la implantación de un Quantitative Easing (QE) en Europa, las previsiones de beneficio de las gestoras de fondos y de bolsa se han incrementado, de media, un 8%.
Según los datos de Bloomberg, las 19 mayores firmas de fondos de inversión cotizadas ganarán en conjunto 12.200 millones de euros para 2015, por encima de los 11.283 millones que estimaban a comienzos de año. Una cifra que, además, supone un 23% más de lo que ganaron durante todo 2014: 9.902 millones.
Es uno de los sectores favorecidos por este nuevo programa de estímulos del BCE. Y es que se convierte en principal beneficiado a medida que hay más liquidez en el mercado. Lo que, precisamente, se espera que ocurra con la implantación del QE.
Entre las grandes cotizadas, la que más ganará será la americana BlackRock. El consenso de mercado que recoge FactSet baraja la cifra de 3.192 millones de euros en 2015, por encima de los 2.722 millones que ganó el año pasado. Pero no solo eso, supone un beneficio histórico para la firma -ver gráfico-. La siguiente que más ganará será Franklin Templeton: 2.098 millones de euros frente a los 1.970 de 2014. Seguida de T Rowe Price, que ganará según los datos de FactSet 1.208 millones de euros por encima de los 1.016 del ejercicio anterior. Por su parte, Invesco ganará 1.083 millones de euros, frente a los 817 de 2014.
En todas ellas supone un beneficio histórico, según los datos de FactSet, pero que también lograrían otras ocho gestoras a finales de este año si se cumplen las estimaciones de FactSet. Se trata de Schroders, Affiliated Managers Group, Aberdeen Asset Management y CI Financial Corp. Por su parte, la gestora Janus Capital, que tiene un patrimonio de alrededor de 3.000 millones de euros, es a la que más le han incrementado las estimaciones de beneficio este año: un 23%.
Todo esto encaja en un marco más que optimista en la industria de la inversión colectiva en España, que cerró el año pasado con un patrimonio récord de 419.000 millones de euros según Inverco.
Más efectos del 'QE'
Ayer se vio en el mercado otro efecto colateral de la política ultraexpansiva del BCE: la rentabilidad del bono irlandés a cuatro años se puso por primera vez en la historia en negativo, al situarse intradía en el -0,002%. Lo que significa que los inversores llegaron a pagar por refugiarse en la deuda irlandesa. No obstante, esta referencia consiguió repuntar y cerrar la sesión con una rentabilidad del 0,002%.