Indra acumula dos sesiones seguidas de recuperación en bolsa (en las que ha subido un 8%), pero en poco más de dos semanas llegó a perder cerca de un 20% de su valor en el parqué. ¿El motivo? Primero una fuerte decepción del mercado con sus resultados del tercer trimestre y después un requerimiento de la CNMV pidiéndole más información sobre sus cuentas de 2013, algo que generó incertidumbre en el mercado.
Sin embargo, el hecho de que sus acciones hayan llegado a derrumbarse en estas dos semanas hasta los 7,8 euros ha sido aprovechado por uno de sus inversores de referencia para incrementar sus posiciones en la compañía a precios más bajos. Corporación Financiera Alba, el holding de la familia March, ha adquirido algo más de un millón de títulos en los primeros días de noviembre (entre el 3 y el 6, en plena corrección del título). Lo ha hecho a precios entre los 7,96 y los 8,87 euros por acción, con lo que, en total, se ha gastado 9,1 millones de euros en comprar acciones de
Indra en rebajas.
Con esta última adquisición, Alba ha reforzado su posición como segundo mayor accionista de la tecnológica, con un 11,3% de su capital. Según los analistas, desde los precios a los que ha comprado el holding, el valor tendría recorrido hasta los 10,51 euros (es su valoración de consenso), lo que implica un potencial de subida respecto al cierre del martes del 24,26%. Sin embargo, esa valoración ya ha sufrido un recorte a raíz de la decepción que proporcionó la tecnológica con sus cuentas trimestrales, ya que antes, los expertos consideraban que podía escalar hasta los 11,8 euros. Es más, su recomendación sigue siendo de venta.
Al margen de Indra, Alba mantiene entre sus principales inversiones a Acerinox, en la que posee un 23,1% y Clínica Baviera, de la que tiene un 20% de su capital. En ACS y Antevenio posee más del 10%.