
Casi 500 millones de euros. Esta es la cuantía que se repartirán los principales accionistas de Repsol -CaixaBank, Sacyr, Pemex y Temasek- por la vía del dividendo extraordinario que anunció ayer. Una cifra a la que hay que sumar otros 500 millones que se llevarán mediante el pago ordinario que reparte la petrolera.
Sumando ambos dividendos, entre estos cuatro inversores se embolsarán en 2014 cerca de 1.000 millones de euros en dividendos.
De este modo, aunque CaixaBank será la que obtenga una mayor cuantía vía dividendo extraordinario, recibirá cerca de 157 millones de euros gracias a su participación del 11,82% en la petrolera, será Sacyr, que posee un 9,23% de Repsol, la más beneficiada por esta medida.
La más beneficiada
Y es que la constructora está en pleno proceso de refinanciación de su deuda, que a cierre del primer trimestre del presente ejercicio asciende a 5.860 millones, por lo que destinará los 122 millones de euros del pago extraordinario a amortizar los intereses de la deuda contraída por la compra de la participación en Repsol, que asciende a 2.337 millones de euros y vence el año que viene.
Con esta amortización, su deuda neta se verá reducida un 2% tan solo con el cobro del dividendo extraordinario. Además, cabe destacar que "el beneficio operativo previsto para Sacyr este año es de 500 millones de euros, por lo que este pago representa más del 20% de sus ganancias", comenta Rubén de la Torre, gestor de renta variable en Inversis.
Por otra parte, la participación en el capital de Repsol que tiene Sacyr sigue valiendo más que la propia firma de infraestructuras en bolsa, que ostenta el consejo de compra más sólido del Ibex 35. Así, actualmente Sacyr capitaliza a unos 100 millones menos de lo que vale su participación en Repsol (unos 2.500 millones).
Sin embargo, no sólo Sacyr sale ganando, pues tal y como señala Alberto Roldán, analista y gestor de fondos, "para Pemex esta es una decisión muy positiva, sobre todo porque el euro está fuerte y el cambio de divisas le beneficia". En este sentido, la mexicana, que posee un 9,19% en Repsol, se embolsará más de 121 millones de euros solo con el dividendo extraordinario.
Con una participación del 6,26% en la petrolera española, Temasek es la que menos ingresará, ya que la cuantía que recibirá por la vía del extraordinario rondará los 83 millones.
