Este martes se cumplen dos semanas de la salida a bolsa de eDremas Odigeo, un estreno que no ha pasado desapercibido para los bajistas. Y es que, según los datos publicados por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los inversores que toman prestadas acciones para venderlas y recomprarlas más tarde con la intención de que caigan y puedan ganar esa diferencia, ya controlan el 0,65% del capital.
Desde que comenzara su andadura en el parqué a un precio de 9,81 euros, el grupo ha logrado avanzar más de un 8%, hasta los 10,6 euros con que despidió la jornada del Jueves Santo -las bolsas europeas permanecieron cerradas-. Eso sí, no ha sido la única firma en la que los cortos han puesto sus ojos. Así, la CAM, Banco Santander y Nicolás Correa vuelven a tener una parte de su capital invertido a la baja, un 0,2%.
El mayor incremento
Fue a finales de marzo cuando Liberbank -resultante de la unión de Cajastur-Banco CCM, Caja Cantabria y Caja Extremadura- anunció su propósito de llevar a cabo una ampliación de capital por valor de 500 millones de euros. Aunque la medida no se ha propuesto a la junta de accionistas aún (se hará el 29 de abril) las consecuencias de esta decisión ya son palpables. A este respecto, la entidad se ha convertido en el valor en el que más han aumentado las posiciones bajistas. De este modo, si hace quince días controlaban un 0,56% de su capital, ahora este porcentaje se sitúa en el 1,57%.
Gamesa y FCC son las otras dos firmas en las que más se han fijado los bajistas, ya que en la primera los cortos se han incrementado en 0,92 puntos porcentuales y en la constructora ya suponen el 3,9%, el nivel más elevado desde finales de junio del año pasado. El revuelo que ha generado la tasa Tobin también ha atraído a más bajistas hacia BME, ya que estos inversores han crecido en 0,24 puntos porcentuales. No obstante, es Meliá la que sigue liderando el ránking de compañías con mayor número de cortos, ya que éstos han vuelto a incrementarse en un 0,5 puntos porcentuales, hasta el 13,55%, un nuevo récord.
Y mientras en unos crecen... en otros se van. Es el caso de CaixaBank, donde los bajistas han pasado de controlar el 1,7% hace quince días, a menos del 0,2% (el nivel mínimo que se exige para comunicarlo).