Un día después de la fecha comunicada inicialmente por la farmacéutica para la publicación de sus resultados -el huracán Sandy provocó que se retrasasen a hoy antes de la apertura del mercado- Pfizer ha presentado unos resultados trimestrales en los que ha brillado un gran ausente: su medicamente superventas Lipitor, cuya patente ha expirado este año.
Agridulce puede ser la palabra que mejor califique los resultados para el tercer trimestre de 2012 que ha publicado el gigante farmacéutico Pfizer. La compañía, que por culpa del huracán Sandy retrasó en dos días la comunicación de sus resultados, ha publicado un beneficio por acción (BPA) de 0,53 dólares, en línea con lo esperado por el mercado (0,525 dólares por acción), de acuerdo con el consenso recogido por Bloomberg. El BPA estimado para el último trimestre del año es de 0,485 dólares.
La parte amarga ha venido del lado de las ventas, que no ahn alcanzado los 14 millones de dólares; de hecho, son un 4,7 por ciento inferiores a lo estimado. La razón de esta caída ha sido la expiración el año pasado de la patente de Lipitor en EEUU, el medicamento superventas que había llenado las arcas de Pfizer en los últimos años.
La reacción de los inversores tras la publicación de estos números ha sido de castigo para el valor, que en estos momentos se coloca a la cola de los valores del Dow Jones (sólo le supera en pérdidas Wal-Mart), en una jornada de normalización para la bolsa de Nueva York en la que el índice se anota un alza en torno al 1 por ciento. Según publica el medio de noticias económicas MarketWatch, la compañía planea adquirir acciones propias por valor de 10.000 millones de dólares cuando cierre la operación de venta de su división de nutrición a Nestlé.
Por el momento no se ha resentido la recomendación de Pfizer, que sigue siendo un 'comprar' muy sólido para el consenso de mercado, y por ello sigue siendo uno de los miembros integrantes de elMonitor.