
Era la cita del día. El BCE celebraba su reunión mensual y todos, includio el mercado, estaban especialmente pendientes a las palabras de gobernador, Jean Claude Trichet. Una palabras que, en la medida que anticipan una subida de tipos en su próxima reunión de abril, han causado sorpresa en todos los mercados pero ¿qué significan?
Increíble. Así, es como ha sido la reacción del mercado tras no oir a Trichet diciendo que el nivel de tipos al 1 por ciento es el "apropiado". Ahora, por primera vez en mucho tiempo, el gobernador del banco central considera que el hecho de que la inflación en la eurozona se acerque más al 3 que al 2 por ciento es un problema. Por lo que promete una "vigilancia fuerte" sobre la inflación y anticipa que es posible que el resultado de la reunión de abril sea una subida de tipos de interés.
Basta con ver cómo ha reaccionado el mercado para darse cuenta que no se esperaba la dureza de las palabras de Trichet y tampoco que el BCE esté dispuesto a subir el precio del dinero cuando la recuperación económica, en caso de haberla, es tan sólo incipiente.
1. Bolsa
Antes de que Jean-Claude Trichet apareciera ante los medios de comunicación en la tradicional rueda de prensa, el Ibex 35 disfrutaba de subidas superiores al 1 por ciento. El Tesoro español conseguía, una vez más, financiación en el mercado con una subasta de bonos en la que aumentó la demanda pero también la rentabilidad.
Los inversores parecían aprovechar la coyuntura para reencontrarse con el mercado. De hecho, fue justo antes de que empezara a hablar Trichet cuando el Ibex 35 marcó máximos intradía al superar los 10.780 puntos.
La situación post Trichet fue muy distinta. El Ibex empezó recortando primero las ganancias para luego reencontrarse con las pérdidas, del 0,40 por ciento, convirtiéndose en el único índice en rojo a estas horas. La razón, simple. El índice español es uno de los más apalancados ya que, sin contar a los bancos las compañías que lo integran tienen 187.000 millones de euros en deuda, casi 3 veces su beneficio. Una subida de tipos encarecería por tanto su financiación.
2. Divisas
La posibilidad de que el BCE suba los tipos de interes más pronto que tarde tuvo también un efecto inmediato en el euro. La moneda única tocó su precio más alto desde el 8 de noviembre al cotizar en 1,3974 dólares.
El mercado se anticipa así a una subida de tipos y parece priorizar esta idea sobre la posibilidad de que vuelva a producirse una crisis de la deuda soberana, pese al hecho de que una subida de los tipos antes de tiempo puede ser muy negativa para las economías de los países periféricos por no hablar de que la financiación se les encarecerá considerablemente.
3. Renta Fija
El mandato del BCE es controlar la inflación y el miedo a que ésta siga en aumento, como consecuencia fundamantalmente del incdremento de las materias primas en general y del petróleo en particular, es lo que puede llevarle a subir tipos. Disminuiría así las presiones inflacionistas y la inversión en bonos perdería valor.
Esto explica que una vez conocida la posibilidad de un alza de tipos, los inversores se hayan lanzado a vender bonos con el consiguiente repunte en sus rentabilidades. Sobre todo en el corto plazo. Así, el rendimiento de la deuda pública alemana ha repuntado hasta el 1,75 por ciento, máximo en dos años, y el bono a 10 años hasta el 5,38 por ciento.
En España, las ventas han sido más moderadas. El rendimiento del bono a 10 años ha pasado hasta el 5,38 por ciento, lo que ha reducido el diferencial con respecto al alemán hasta los 208 puntos, el nivel más bajo desde el 16 de febrero.
4. Materias primas
Es la reacción más extraña. Si bien el oro suele revalorizarse cuando el dólar pierde valor, la posibilidad de que la inflación se quede tan sólo en una amenaza y no se convierta en realidad llevó a los inversores a desprenderse de los lingotes.
El oro marcó su precio más bajo del día justo cuando Trichet empezó su rueda de prensa al cotizar en los 1.417 dólares por onza, lo que supone una caída del 0,5 por ciento con respecto a sus máximos históricos de ayer.