
España ha conseguido colocar 3.877 millones en letras a 3 y 6 meses en la última subasta del año, en la parte alta del objetivo previsto, que era de entre 3.000 y 4.000 millones.
La subida de la rentabilidad ha sido moderada. En concreto, a tres meses el Tesoro ha colocado 3.000 millones con una rentabilidad del 1,804%, frente al 1,743% de la anterior subasta, realizada el 23 de noviembre. Esto supone un encarecimiento del 3,5%.
A 6 meses, el encarecimiento ha sido mayor, ya que la rentabilidad ha subido del 2,111% al 2,597%, lo que supone un 23% más. El Tesoro ha colocado 877 millones a 174 días.
La demanda a 3 meses ha sido de 2,14 veces la oferta, algo por debajo de la anterior subasta, que fue de 2,34. El ratio de cobertura a 6 meses, sin embargo, se ha disparado hasta 5,15, frente al 2,65 de la anterior. De nuevo la demanda ha respondido a las subidas de los intereses.
Se quintuplica el interés en un año
La moderación del encarecimiento (la última emisión se encareció un 90%) no esconde que el Tesoro está pagando más de 5 veces más en diciembre para financiarse de lo que hacía en enero, ya que en la primera subasta del año, del pasado 12 enero, la rentabilidad de las letras a tres y seis meses se quedó en el 0,37% y el 0,46%, respectivamente.
"Ha sido una muy buena subasta, con unos buenos ratios", dijo Estefanía Ponte, economista de Cortal Consors, a la agencia de noticias Reuters.
Tras la subasta, la prima de riesgo se mantiene con subidas y se mueve en los 256 puntos, mientras que la rentabilidad del bono a 10 años se mantiene por encima del 5,53%.