
Fue en en marzo de 2005 cuando un informe de Goldman Sachs hizo temblar a los mercados al prever que el petróleo podrían tocar los 105 dólares por barril. El banco de inversión ha vuelto a revivir el fantasma al asegurar que el crudo puede alcanzar ese nivel en cuestión de meses. Sus analistas no son los únicos en augurarlo.
Arjun Murti, analista de Goldman Sachs, cuya sede está en Nueva York, sacudió a los mercados en marzo de 2005 con un informe que decía que los precios podrían tocar los 105 dólares por barril durante un período “súper alcista”, porque la demanda era mayor que la prevista. El experto en materias primas del mayor banco de inversión del mundo Jeffrey Currie acaba de retomar esa idea.
Augurios
Currie ve probable que se alcancen los 95 dólares este año a menos que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) aumente inesperadamente la producción. Además, indica que los menores reservas en Estados Unidos están aumentando las posibilidades de que el petróleo llegue a los 100 dólares el barril.
Currie, responsable de análisis de materias primas en Londres, pronostica que los precios del crudo probablemente alcanzarán un récord y permanecerán en niveles sin precedentes durante meses o años. "A fin de cuentas, la clave para la perspectiva futura es cuándo incrementará la producción Arabia Saudí", ha indicado en una entrevista.
"Si se llega a una situación en la que los inventarios a nivel mundial caen a niveles críticamente bajos, la volatilidad en este mercado podría explotar, lo cual incrementa de forma significativa la probabilidad de los 100 dólares el barril", augura Currie, que, sin embargo, cree que el precio podría caer a 73,50 dólares si la OPEP empezara a producir más ahora.
Factores claves
El mercado casi descarta por completo que el cártel tome medidas para aumentar la producción de crudo a corto plazo pese a que considera los actuales niveles de precios como excesivos. La OPEP cree que los niveles de 60-65 dólares por barril serían más adecuados tanto para los productores como para los consumidores.
Por el momento, los analistas señalan que son las expectativas de un elevado crecimiento mundial las que mantienen los precios a niveles altos. Como ejemplo, mencionado por la OPEP, está la elevada demanda de crudo desde China con subidas del 20% anuales, y superiores al 25% en el caso de las importaciones de crudo del gigante asiático desde Irán.
La estrechez en el refino es también considerado como uno de los factores fundamentales que explican la tensión en los precios de crudo. A ello se suma que en los dos últimos ejercicios se ha acentuado la influencia del verano en la cotización del petróleo y los precios han alcanzado sus máximos anuales con el calor, cuando la demanda de gasolina se dispara. "Bien es cierto que la reducción de la prima de riesgo por la temporada de huracanes podría, como de hecho ocurrió en 2006, llevar a una reducción de los precios del crudo tras el verano", señala José Luis Martínez, estratega de Citigroup.
A la espera de los 100 dólares
Jeff Rubin, de CIBC World Markets, predice que se alcanzarán los 100 dólares el próximo año. "Estamos tan sólo a un titular trascendente de los 100 dólares por barril", ha indicado John Kilduff, analista en el broker de futuros Man Financial, en Nueva York, según Bloomberg. "La imparable presión de la creciente demanda ha producido una espiral alcista en el mercado", ha afirmado para advertir que nuevas interrupciones en el suministro de Nigeria o Irak, o cualquier acción militar contra Irán, podrían provocar la subida.
Hoy, los precios del crudo mantinen la línea descendente que iniciaron a finales de la semana pasada. El Brent cede un 0,91% hasta los 76,26 dólares, mientras que el West Texas, de referencia en Estados Unidos, retrocede un 0,75% y se negocia a 74,33 dólares. En lo que va de año, el conocido como oro negro se ha revalorizado algo más de un 25%.