
Seguro que conoce a alguien que siempre que va al banco consigue una remuneración algo más alta en los depósitos que contrata y unos créditos algo más baratos. En el mercado de deuda pública ése sería Alemania. La primera economía de la zona euro, por su mayor producto interior bruto entre otros factores, se considera la referencia para los inversores en deuda pública.
De ahí que no sólo estén dispuestos a cobrar menos intereses por adquirir sus emisiones, sino que midan el atractivo de las realizadas por otros países en base a la remuneración del bono alemán. Y el mercado está diciendo a Grecia que o retribuye mejor sus emisiones o no se las compra.
Financiación más cara
Tras la rebaja de rating de Fitch le está exigiendo a este país que ofrezca 240 puntos básicos más que lo que le pide a Alemania para comprarle bonos a 10 años -un interés del 3,13%-. Es la exigencia más alta desde el mes de abril, cuando el sentimiento del riesgo era mucho más alto -el índice Vix que mide la volatilidad del índice estadounidense S&P 500 cotizaba entre 40 y 35 puntos frente a los 23 actuales-.
En una semana, además, el diferencial ha pasado de los 168 puntos al actual. Así, en apenas siete días el coste de financiación se le ha encarecido al estado griego un 15%.
El seguro contra el hipotético impago de la deuda (CDS) de Grecia ha escalado en los últimos días por encima de los 200 puntos. Son niveles similares a los del mes de marzo. Y ha arrastrado con ella a otros países de la zona euro a los que o bien han recortado la calificación en los últimos meses como a España y a Irlanda, o se encuentran en el grupo con mayores problemas, como Italia y Portugal (en general los países de la eurozona cuyos rating generan más dudas son los periféricos).
En el caso Irlanda -que sí ha sufrido rebajas de nota- el diferencial de su deuda sobre la deuda pública alemana también ha subido en los últimos días hasta los 189 puntos, que es su nivel más alto desde el mes de julio. Portugal e Italia también han visto cómo los inversores, a raíz de los últimos retoques de calificación de las agencias, les exigían que emitieran deuda con intereses algo más altos. En el caso portugués, es el diferencial más elevado desde julio -77 puntos básicos-, aunque el seguro contra impagos cotiza a niveles de noviembre.