
El VIX, la medida favorita del miedo en Wall Street, se disparó un 13% este lunes, lo que indica que el sentimiento del mercado está empeorando claramente y que los operadores esperan caídas de la bolsa este verano.
El VIX mide la volatilidad que descuentan las opciones sobre el S&P 500 y, cuanto más alta es dicha volatilidad (y el índice), mayor es el miedo de los operadores a una caída de la bolsa. El índice superó el lunes los 30 puntos, un nivel que suele interpretarse como una señal bajista para el índice.
La escalada de este indicador ya había comenzado la semana pasada, en una señal de que los inversores empezaban a pensar que esta vez sí va a llegar el esperado pullback después del fuerte rally de los últimos tres meses, superior al 35% desde los mínimos de marzo.
Detrás de estos negros presagios se encuentra la falta de confirmación del optimismo sobre la recuperación económica que se había instalado en el mercado. La rebaja de previsiones del Banco Mundial y la corrección de las materias primas van en esa dirección. "La gente se está dando cuenta de que todos esos brotes verdes se están volviendo marrones", opina gráficamente Dave Rovelli, de Canaccord Adams. A su juicio, con los resultados del segundo trimestre a la vuelta de la esquina y el paro acercándose al 10%, es lógico que los inversores tengan miedo.
El VIX seguirá subiendo
Con este escenario, los operadores apuestan a que el VIX seguirá subiendo, y hay quien lo ve por encima de 45 puntos en julio. Aunque se trata de una fuerte subida desde los niveles de las últimas semanas, el índice se encontraría a la mitad de los 90 puntos que alcanzó en pleno terremoto bursátil en noviembre. Además, la diferencia entre el VIX y la volatilidad real del mercado ha empezado a crecer, lo que es una señal bajista típica en el mercado.
"Esto se resolverá o bien con un aumento de la volatilidad real (probablemente con una caída del S&P 500 hasta el nivel de 880), o bien con una convergencia del VIX hacia los niveles actuales de volatilidad si se mantiene el movimiento lateral del índice", explica Larry McMillan, presidente de McMillan Analysis,
Ahora bien, no hay que olvidar que el VIX también suele interpretarse desde la teoría de la opinión contraria, esa que afirma que el mercado siempre se mueve al contrario que el sentimiento generalizado. Desde ese punto de vista, si crece el miedo y los inversores se salen del mercado, estaremos ante una buena oportunidad de compra.
Pero Rovelli aconseja no apostar por ello: "Ya hemos tenido el gran movimiento alcista. Si no estabas dentro, te lo has perdido y ya sólo te queda seleccionar valores concretos. La fiesta ha terminado".