M. Continuo

ENTREVISTA-Artur Mas: La independencia dividiría a los catalanes

Por Teresa Larraz

MADRID (Reuters) - Convocar un referéndum de autodeterminación sólo serviría para dividir a los catalanes, según Artur Mas, candidato de Convergencia i Unió y favorito para ganar las elecciones del domingo en Cataluña, donde de resultar ganador apostaría por un convenio fiscal propio que condicionaría su apoyo al Gobierno central.

"Nosotros apostamos por el derecho a decidir de los catalanes en aquellas materias que generan más consenso, como por ejemplo, un nuevo pacto fiscal que permita a Catalunya recaudar y gestionar los propios impuestos", dijo Mas, comparándolo con el concierto económico del País Vasco o el convenio de Navarra, en una entrevista por escrito con Reuters.

"Creemos que se debe apostar por temas que unan a los catalanes y un referéndum por la autodeterminación divide en dos mitades", agregó.

Cataluña acude a las urnas el 29 de noviembre con la incógnita de si CiU logrará una victoria suficiente para gobernar en solitario, opción preferida por su máximo dirigente después de dos legislaturas de gobierno de socialistas, independentistas y ecologistas de izquierda.

El 'Govern' resultante también tendrá su influencia en Madrid, a un año y medio de las próximas elecciones generales, en las que tampoco se vaticina un vencedor con mayoría absoluta, en un contexto de estancamiento económico y de incertidumbre sobre si la crisis en Grecia e Irlanda se extenderá a España.

"Nosotros nos preocuparemos de conseguir un pacto fiscal para Catalunya y esa será nuestra prioridad en Madrid en los próximos años", afirmó quien fuera "delfín" del presidente catalán durante 23 años, Jordi Pujol. "Si alguien pretende el apoyo de CiU, deberá aceptar nuestras condiciones", añadió.

Los sondeos dan a los nacionalistas moderados de centroderecha como vencedores de los comicios, aunque sin mayoría absoluta. Por ello, y salvo en el caso poco probable de que los socialistas de José Montilla recaben más apoyos en estos últimos días o que los partidos del tripartito sumen mayoría absoluta y se animen a repetir una coalición que las tres formaciones han rechazado, se abren varias posibilidades para CiU.

Mas, que critica duramente los "constantes desencuentros y falta de un proyecto común" del tripartito, deja clara su opción de intentar obtener una mayoría que le permita gobernar solo con acuerdos puntuales.

"No nos hemos planteado alianzas (...) Es evidente que para tomar decisiones concretas para una u otra ley podemos pactar con unos o con otros, pero para dirigir el país es necesario un gobierno sólido con un único proyecto y un liderazgo fuerte", añadió.

Y sus dos socios más probables, al menos de cara a una investidura, no podrían ser más diferentes: Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y el Partido Popular (PP).

ERC ha condicionado su apoyo a la celebración de un referéndum de autodeterminación, mientras que el PP es visto con recelo desde ciertos sectores por el recurso de inconstitucionalidad que presentó contra el Estatut y que llevó a la anulación de algunos de sus elementos más simbólicos del texto -como el uso del término "nación"-, lo que causó un gran malestar en una parte de Cataluña.

Mas también reprueba la sentencia, que dice que abre la puerta a "empezar a buscar nuestro camino".

"El Estatut era nuestra propuesta política de integración en el Estado, y después de la sentencia del Tribunal Constitucional esta propuesta ha sido rechazada", señala. "Ha llegado el momento en que sea el Estado el que se pregunte hasta qué punto está interesado en el encaje de Cataluña en España (...) en función de esa respuesta, Catalunya deberá tomar sus propias decisiones".

"DE ZAPATERO UNO NO SE PUEDE FIAR"

Cuestiones identitarias aparte, la situación económica es el gran reto al que se enfrentan los políticos, ya que España no acaba de entrar en la recuperación, con un crecimiento plano en el tercer trimestre y una previsión del Gobierno de una contracción del 0,3 por ciento este año. El paro afecta a uno de cada cinco españoles, una cifra que se sitúa en el 17,4 por ciento en Cataluña.

Preguntado por la gestión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, Mas es claro: "Ha reaccionado tarde y mal a la crisis económica y finalmente ha tomado decisiones que le han sido impuestas desde fuera. El presidente Zapatero ha dado muestras de ser una persona de la que uno no se puede fiar".

Las propuestas del político barcelonés de 54 años se centran en apoyar a las empresas, y por ello propone acabar con las trabas administrativas, "de manera que seamos un país donde crear empresas, y en consecuencia, empleo, sea sencillo".

"Las medidas más urgentes deben ir en la dirección de aportar mayor liquidez a nuestras empresas, rebajar la morosidad y establecer mecanismos que permitan una mayor internacionalización de los proyectos empresariales", explica.

Además, insiste en la necesidad de un gobierno fuerte en la Generalitat "que esté dispuesto a tomar decisiones, aunque algunas de ellas no sean populares".

Por ello, apuesta por el marco fiscal propio, porque "Cataluña necesita ese modelo para crecer y seguir prosperando, contribuyendo así también a la mejora de todo el Estado".

El actual modelo de financiación da a cada comunidad autónoma el control sobre el 25 por ciento de sus propios ingresos fiscales, mientras que el 75 por ciento restante se suma y se divide entre todas según su población.

"No se puede seguir asfixiando una economía y luego pedirle que siga siendo locomotora de la economía española", remarcó.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky