
Un mes antes de la entrada en vigor de las sanciones de Estados Unidos a Irán -el tercer mayor productor de la OPEP-, el precio del petróleo continúa renovando máximos de 2014. El martes volvió a tocar los 85 dólares por barril, lo que llevó a siete petroleras europeas a cerrar la sesión en máximos del año, y a otras cuatro, a rozarlos.
Desde que arrancó el ejercicio, el precio del Brent, de referencia en Europa, se anota una subida del 27%, un avance que contrasta con el mal comportamiento que presenta la bolsa europea en este mismo periodo. En este rally se han apoyado las compañías del sector para ser las más alcistas en el Viejo Continente en lo que llevamos de año, tras un rebote del 15%.
La última escalada del oro negro ha venido después de que la OPEP no alcanzase un acuerdo para decidir quién sustituirá la producción iraní que desaparecerá del mercado en noviembre y de que Arabia Saudí y su aliado Rusia descartaran un incremento adicional en la producción. Una decisión que tensionó aún más las perspectivas de demanda en un momento en el que las reservas de crudo de EEUU se han reducido a mínimos de tres años y medio y que llevó al barril a superar la barrera de los 80 dólares.
"La situación del suministro es frágil, y cualquier caída adicional, como por ejemplo por la coyuntura de Venezuela, reducirá aún más la oferta de petróleo", ha subrayado el responsable de investigación de materias primas de Julius Baer, Norbert Rucker.
Desde la reunión celebrada a finales de septiembre, el precio de la materia prima se ha disparado más de un 7%. Motivo por el que las principales casas de comercio de petróleo empezaron la semana pasada a contemplar de nuevo la posibilidad de ver al crudo en 100 dólares por barril por primera vez en cuatro años, si bien algunos analistas se muestran bastante más escépticos. Goldman Sachs advierte del peligro de ver al petróleo por encima de los 80 dólares. "Estas preocupaciones surgen de las potenciales pérdidas de que las exportaciones iraníes excedan la capacidad de producción de la OPEP".
En este contexto, la industria europea está haciendo su agosto a falta de un trimestre para cerrar 2018: Aker, Equinor, Neste y Total se revalorizan en bolsa más de un 20% en lo que va de año.
Las británicas Premier Oil, John Wood, RockRose Energy, Petrofac y Energean, la holandesa SBM y la noruega Aker cerraron el martes la sesión en máximos del año, tras anotarse entre un 0,1% y un 2,3%. Y la italiana Saipem, la sueca Lundin, la francesa Total y Repsol, se quedaron muy cerca de alcanzarlos.
Las recomendaciones de los analistas siguen siendo positivas sobre el sector en los próximos meses
"Queda tan solo un mes para que entren en vigor las sanciones estadounidenses y los inversores ya están preocupados por los niveles de oferta", señala David Madden, analista de CMC Markets.
Pero lo cierto es que las recomendaciones y valoraciones de los analistas siguen siendo positivas sobre el sector de cara a los próximos meses. Así, cinco de las diez grandes petroleras europeas por capitalización bursátil cuentan con un consejo de adquirir sus títulos por parte del consenso de mercado que recoge FactSet. Es el caso de Royal Dutch Shell, Total, BP, Repsol y OMV, que cuentan con las mejores recomendaciones del sector.
Asimismo, los expertos aún no ven agotamiento en las subidas, a tenor del precio objetivo en el que continúan valorando a las grandes del sector. La mayoría de ellas todavía cuenta con recorrido en el parqué de cara a los próximos meses a pesar de las subidas. En el caso de Royal Dutch Shell, Total, Eni y OMV, el potencial es de doble dígito.