Quiero compartir con vosotros la preocupación por los tiempos duros que vive nuestra sociedad, y en concreto, porque es lo que me toca, la profesión periodística. Muchos compañeros y compañeras lo están pasando mal. El futuro se vislumbra incierto.
No hay una sola semana que no haya un parte de baja. Casi ningún medio privado ni empresa pública -estás últimas más recientemente, eso sí- se salva de ERE, cierres o recortes salariales. La crisis ha dejado ya en el paro a más de 6.500 periodistas y lo peor es que todavía no se ve el final del túnel. Los últimos perjudicados han sido los trabajadores del Granada Hoy y Málaga Hoy, del grupo Joly.
El cierre de un periódico es una mala noticia. Pero no podemos abandonarnos al desaliento. Periodistas y políticos tenemos ante nosotros el difícil reto de recuperar la credibilidad, y eso sólo lo podemos hacer desde la esperanza, la honestidad, y el compromiso. Sin la confianza de los ciudadanos, perdemos nuestra más noble razón de ser.
Entre col y col, lechuga. No todo son malas noticias. La llegada de la primera empresa de origen coreano, Hanil Sciencie Industrial, al Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) es un balón de oxigeno para nuestra economía. Esta compañía, dedicada a la producción de equipamiento médico y laboratorio, como centrifugadores o maquinaria para análisis, abrirá su negocio al mercado europeo desde la capital de la Costa del Sol a partir de enero de 2013.
La empresa se dedicará a la distribución en Europa de los productos fabricados en Corea del Sur, pero su idea en un futuro, y esto es lo más relevante, es crear un centro de investigación y producción en Málaga.
El presidente de la compañía, Kyu Ho Chang, ha elegido Málaga por sus investigadores. Lo importante es que viene con la idea de empezar en el comercio europeo desde Andalucía, comunidad que se une a Corea en investigación y transferencia de conocimiento gracias a los acuerdos de cooperación entre las universidades de Málaga e Hinchen, el Parque Tecnológico de Sondo y el propio PTA.