Antonio Pérez Ostos accedió a la presidencia de Cecofar, una de las cinco mayores distribuidoras farmacéuticas de España, a finales de junio. Concede su primera entrevista a elEconomista para explicar los planes de futuro del grupo cooperativo.
P. ¿Qué balance hace de los últimos años de medidas de recorte en el gasto farmacéutico?
R. Venimos de tres años en los que se han tomado una serie de medidas legales por parte del Gobierno central y autonómico para disminuir el gasto en medicamentos. Todas han ido influyendo en nuestra facturación, del sector y de Cecofar. Particularmente nos hemos comportado mejor que el conjunto del mercado en las zonas donde operamos, según datos de IMS Health. Pero, de todas formas, no han sido datos optimistas.
Todo esto provoca que nos encontremos en una situación de inseguridad jurídica grande porque no sabemos bien qué puede pasar el mes que viene o dentro de un año, y eso ralentiza la adopción de decisiones de inversión. Sí es verdad que parece que la situación está llegando a su límite. Pero, por ejemplo en Andalucía acaba de llegar una nueva consejera de Salud y no sabemos si va a tomar más medidas o no.
P. ¿Esa prudencia a la hora de tomar decisiones de inversión, prevé mantenerla también durante el próximo año?
R. Depende de cómo veamos el panorama político y jurídico que nos pueda afectar. Estamos tomando medidas para paliar la pérdida de facturación mediante una política de control de gasto desde hace tres o cuatro años. También nos ayuda que estamos en varios mercados, no sólo Andalucía, históricamente y eso respalda nuestra cifra de negocio. Ahora mismo es época de ser precavidos.
P. En Andalucía, toda la polémica legal y política entre Gobierno central y autonómico, ¿cómo afecta a Cecofar?
R. Nos afecta porque nos crea esa inseguridad jurídica. Pero tenemos que seguir tomando decisiones. No es bueno que haya este enfrentamiento entre comunidad autónoma y gobierno central. Nos afecta también porque se toman medidas diferentes: Andalucía apuesta por una subasta de fármacos, y el Gobierno central por el copago. Todo esto te va creando inseguridad, aunque tampoco te puedo decir que hayamos dejado de hacer nada. Los pasos que sean necesarios, los proyectos que veamos viables, se hacen. Seguimos funcionando, pero con algo más de calma.
P. ¿Cómo valora las medidas que se han tomado: crees que alguna es reversible y qué crees que puede venir a futuro?
R. En general, en un país que está en crisis, medidas hay que tomar. Igual que nosotros reducimos gastos generales y de personal, es lógico que los Gobiernos toquen a casi todos los sectores, como ha ocurrido. Las medidas que se han tomado, hasta cierto punto son lógicas. Lo que creo que no pueden hacer es ahogar a un sector entero, en nuestro caso el sector de la farmacia, la distribución y la propia industria farmacéutica. Tienen que ser conscientes de que no pueden apretar más y que el sector se ahogue. Las farmacias, en los últimos tres o cuatro años han podido bajar un 25 por ciento su facturación. Yo pediría a los políticos que sean conscientes de lo que aportan las farmacias. Y mucho más no podemos aguantar.
P. ¿Y crees que las medidas adoptadas son estructurales?
R. Totalmente, pienso que el copago es estructural. Las medidas que se han ido tomando otros años, porque en farmacia se llevan tomando medidas desde 2001 ó 2002 en Andalucía, afectaban fundamentalmente al precio de los medicamentos. Con estas últimas medidas se ha afectado la demanda. La desfinanciación de medicamentos también es estructural. Aunque también es lógico que si van saliendo moléculas nuevas el catálogo se actualice.
De hecho, el gasto por receta en Andalucía hoy es el más bajo de España, está por debajo de diez euros. Y esto es debido a las medidas tomadas en la última década.
P. ¿Tiene alguna referencia sobre la nueva consejera de Salud andaluza, sabe por dónde pueden ir posibles medidas?
R. Es una consejera muy vinculada a la política social. Opino personalmente que seguirá potenciando esa política y bienestar social. La parte de sanidad, no sé, esperemos que bien.
Negocios y nuevo mapa
P. Dentro de Cecofar, ¿qué parte del negocio está en Andalucía y cuánto fuera? ¿Qué cifras esperáis en 2013? ¿Y qué zonas de España tenéis en mente para seguir creciendo más allá de Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y Castilla y León donde ya estáis?
R. En España, nuestra vocación ha sido siempre multiprovincial. En Badajoz llevamos operando tres décadas, por ejemplo. El año pasado compramos dos empresas del mismo propietario en Madrid y Burgos. En España, tal y como está el mercado, hay un exceso de capacidad, somos muchas distribuidoras y pienso que en un tiempo quedarán una serie de grupos distribuidores con una implantación casi nacional en todos los casos. Nosotros estamos ya llegando a País Vasco, donde llevamos cinco meses captando clientes desde Burgos y potenciando las rutas de distribución que la empresa propietaria de este almacén ya tenía con Bilbao.
Nos interesa en general todo el norte de España, no nos cerramos a ninguna fórmula de crecimiento: alianzas, más compras, la que sea. Andalucía representa un 70 por ciento de nuestros ingresos ahora. El resto, en las otras comunidades.
P. ¿Cómo evolucionarán esos porcentajes y a qué plazo, si tenéis alguno definido?
R. Va a crecer claramente el porcentaje de ingresos procedentes de fuera de Andalucía. Pero no tenemos plazos ni objetivos concretos. Marcarse plazos en un mercado controlado por cooperativas de distribución es complicado. Las cooperativas dependen de sus socios, que a la vez son los clientes. Fusiones entre cooperativas son complejas, la primera que se ha dado en nuestro sector ha ocurrido este año entre Vascofar y Aragofar. Cecofar tiene 85 años y es la primera vez que asistimos a un movimiento así en España.
P. En ese nuevo mapa de la distribución farmacéutica, ¿qué grupos quedarán y qué papel quiere jugar Cecofar en él? Fuera de España, ¿os planteáis estar?
R. Depende de cómo evolucione el propio sector en relación a la estabilidad política y jurídica. Pienso lo que ocurre en otros países cercanos, exceptuando Italia, como Francia, Portugal, Reino Unido o Alemania: cuatro o cinco grupos tienen el 80 o 90 por ciento del mercado. En España, según datos de IMS, las cinco primeras ?Cofares, Hefame, Alliance Boots, Cecofar y Federación- ya controlamos casi el 60 por ciento del mercado. Hay un camino ya recorrido. Y actualmente Farmanova en el sur, en septiembre se va a crear otro grupo importante en Galicia y Castilla y León. Hay mucho movimiento y yo creo que va a haber más. Nuestra voluntad es ser consolidador.
Fuera de España lo que tenemos es una alianza con una sociedad de cooperativas europeas, Secof, en la que nosotros representamos a España, y hay miembros de Francia, Bélgica, Portugal, Italia, Alemania y Turquía. Sirve para poner en común información sobre legislaciones de distintos países, y es muy interesante porque España ha sido muy avanzada en el control del gasto farmacéutico, pero ahora la ola ya llega a todos los países de Europa.
Ya tuvimos una empresa de distribución en Portugal, pero la vendimos porque vimos que no conseguíamos los objetivos marcados. De esto hace ya unos ocho años. Es difícil competir en otros países, aunque sean cercanos, por las costumbres y legislación diferentes.
Visualizo más salir fuera mediante una asociación, que genere sinergias a ambos, que con otro tipo de operaciones. En cualquier caso, creo que en España queda aún recorrido suficiente como para pensar en el exterior ahora mismo.
P. ¿Cómo ha evolucionado vuestra facturación y cómo prevéis que se comporte en este contexto?
R. Con los nuevos mercados, y también desarrollando más los mercados en los que ya estamos y en los que aún hay recorrido, la verdad es que estamos cinco puntos por encima del mercado. El conjunto del sector cae este año un 3 por ciento en nuestra zona de influencia, y nosotros crecemos más del 2 por ciento. Crecemos respecto a 2012, cuando facturamos 830 millones, y eso supone volver a crecer por primera vez desde 2009, al menos por los datos que tenemos hasta ahora sobre este año. Nuestro objetivo es cerrar este año en 850 millones. ¿A futuro? Como las medidas tomadas para reducir el gasto farmacéutico son estructurales, creo que el gasto a escala nacional va a seguir bajando. Creo que se va a frenar la bajada o incluso se estabilizará, si no hay nuevas medidas legales. Pero tenemos un decreto de precios de referencia que el Gobierno central quería publicar este año, aunque de momento no sabemos nada e igual se publica el año que viene. Esto va a pegar otra bajada al precio de los medicamentos. Y a esto se añade qué otras nuevas medidas puede tomar el Gobierno andaluz, o en otros mercados donde operamos.
P. ¿Qué inversiones o proyectos, pese a las incertidumbres legales y políticas, son las prioritarias para Cecofar actualmente?
R. Daremos prioridad a las inversiones que nos ayuden a consolidarnos en nuevos mercados. Si accedemos a un mercado en el Norte de España, por ejemplo, tendremos que focalizarnos en temas logísticos. Y si podemos acometer nuevas adquisiciones en nuevos mercados o en otros donde ya estamos, que no tenemos ninguna sobre la mesa ahora mismo, pues ahí irían también los recursos que tengamos.
P. ¿Qué capacidad económica tenéis para hacer esas fusiones?
R. Cecofar está saneada, prácticamente no tenemos deuda (apenas un millón de euros a corto plazo con bancos). Dentro de nuestro sector tenemos una buena capitalización, ya que nuestros fondos propios ascienden a 55 millones. No nos cerramos a recurrir a financiación externa, estará en función del tipo de operación que hiciéramos. Las inversiones grandes se hicieron hace unos años ?en Toledo, hace cinco años, se invirtieron en torno a seis millones-. Y son inversiones que nos siguen dando juego, porque Cecofar ha cambiado su estructura de trabajo: de un solo almacén regulador en Sevilla, ahora tenemos cuatro almacenes automatizados que funcionan en red. Y Sevilla ha liberado capacidad para crecer más, por ejemplo.
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