
El exempleado del banco HSBC en Ginebra, Hervé Falciani, es el hombre clave de la lucha contra el secreto bancario de Suiza y la evasión fiscal después de haber sustraido información sobre 130.000 clientes que presuntamente mantenían dinero negro en sus cuentas en el país helvético. Colaborador de la Justicia española y francesa, asegura que las entidades suizas son el enemigo.
"Los bancos suizos libran una guerra económica. Ellos son el enemigo". Así de rotundo se expresa Hervé Falciani, el hombre que tiene en jaque a los bancos suizos y a buena parte de sus ricos clientes.
En una entrevista exclusiva concedida al diario El País, Falciani asegura que colabora con la justicia española y francesa de manera desinteresada, sin cobrar por ello, y con el objetivo de luchar contra el sistema ideado por la banca suiza que favorece tanto el blanqueo de dinero como la evasión fiscal, algo que "es la gente normal la que está sufriendo sus consecuencias".
"Los datos que yo he proporcionado -posee una lista con 130.000 nombres de posibles defraudadores- no son solo listas de evasores. La información que yo tengo demuestra que los bancos suizos libran una guerra económica", dice Falciani, quien añade que los bancos suizos se adaptan enseguida a cualquier nueva norma que aparece para combatir el fraude fiscal para continuar con su negocio y que es necesario que la justicia cree "órganos multidisciplinares dedicados a la vigilancia de la evasión fiscal y el blanqueo de dinero con personas que tengan conocimientos tecnológicos similares" a los del propio Falciani.
Con los datos aportados por Falciani, España habría podido recuperar hasta ahora 260 millones de euros supuestamente evadidos a la hacienda pública. Suiza ha pedido su extradición imputándole un delito de espionaje industrial que sólo tendría fundamento de demostrarse que Falciani trató de enriquecerse con la información proporcionada, algo que tanto las autoridades francesas como las españolas han desmentido.