
Lorenzo Amor, presidente de la Federación de Autónomos (ATA) pidió ayer al Gobierno una reforma de la fiscalidad de los afiliados al Régimen General de Trabajadores Autónomos (RETA) de la Seguridad Social. La solicitud se la hizo directamente a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que participó en la Junta Directiva de la organización. Análisis | En permanente reforma impositiva, a la espera de la gran reforma fiscal.
En concreto, la petición de Amor pasa porque los autónomos dejen de elegir voluntariamente su base de cotización, tal y como ocurre actualmente, y que pasasen a cotizar "según sus rendimientos netos y no sobre suposiciones". De esta manera, se conseguiría "que los que más ingresos tengan paguen más para que los que tengan menos ingresos paguen menos", defendió ayer Amor durante su intervención.
Base mínima
Según los datos que maneja la organización, en España hay 700.000 autónomos que ganan más de 30.000 euros anuales y que cotizan por la base mínima, pensada para los que tienen ingresos de unos 10.300 euros al año.
La vicepresidenta se limitó a agradecer públicamente la concreción de las medidas propuestas por ATA de cara a una reforma fiscal. Fuentes de la Administración confirmarón, según el diario Cinco Días, que la posibilidad de adecuar las cuotas que pagan los autónomos a sus ingresos reales "es algo que está sobre la mesa".
En concreto, esta reforma estaría destinada sobre todo a trabajadores por cuenta propia que tributan por módulos, aproximadamente la mitad, según dichas fuentes.
Tramos de cotización
La implantación de esta medida dependerá de si se tiene encaje en la reforma fiscal y de si los autónomos están dispuestos a aceptarla de la forma en la que se diseñe. Así, Empleo y Hacienda tendrían que establecer una serie de tramos de cotización en los que se encuadrarían los autónomos en función de los rendimientos netos obtenidos el año anterior.
De esta manera gran parte de los autónomos que ahora pagan la cuota mínima tendrían que pagar más, mientras que otros muchos podrían pagar cuotas más bajas que la mínima actual.
Hay que señalar que la medida de ATA "tiene muchas dificultades para salir adelante, porque requeriría una coordinación máxima entre Hacienda y la Seguridad Social, además de mayores controles a los autónomos", indican desde el colectivo. Igualmente, desde el Ejecutivo dudan que el cambio fuese aceptado por la mayoría de autónomos.