
La Marca España no liderará en esta ocasión a la industria ferroviaria española en su intento por ganar el AVE de México, que unirá en noviembre de 2017 las ciudades de México D. F. y Querétaro. Tras el fracaso del AVE a Brasil, en el que se presentaron dos consorcios españoles -uno liderado por Fomento y otro no-, el Ministerio ha decidido mantenerse al margen de los candidatos interesados en el proyecto, según explican fuentes solventes a este periódico.
Hace dos años, el equipo de Ana Pastor intentó liderar una oferta conjunta para pujar por la alta velocidad en Brasil, pero las diferencias irreconciliables entre Talgo y CAF hicieron imposible esta propuesta y cada uno acabó haciendo la guerra por su cuenta, algo que no sentó nada bien en el Ministerio.
En previsión de que ocurra algo parecido, Fomento ha decidido no liderar la oferta, aunque se deja la puerta abierta por si alguna empresa pública relacionada con el sector ferroviario (Renfe Operadora, Adif e Ineco) quiera participar.
Curiosamente, el interés por este concurso se produce días antes de Innotrans 2014, el salón internacional del ferrocarril que se celebra con formato bianual en Berlín. En la edición anterior, fue cuando Fomento anuncio la oferta de un consorcio español en la que, en un primer momento, no se contó con CAF.
La unión, clave en La Meca
La fuerza de la participación de un consorcio español fue clave en el concurso del AVE que une las dos Ciudades Santas de Arabia Saudí: Meca y Medina. Esta licitación fue concedida a la propuesta liderada por Renfe, Talgo y una decena de empresas españolas en dura puja con la industria ferroviaria francesa, que presionó hasta el último momento para arrebatárselo. Sin embargo, en Brasil no funcionó esa unidad pese a los intentos del Ministerio de Fomento.
La falta de liderazgo oficial del Gobierno para proponer un consorcio único, no impide que a fecha de hoy si que haya confirmado el interés de varias empresas españolas. No es ningún secreto que los dos grandes fabricantes de trenes en España -Talgo y CAF- están analizando el concurso, al igual que multinacionales del sector como Siemens o Thales, que podrían participar desde sus filiales españolas aprovechando el know-how y los centros de excelencia con los que cuentan en el país. Otras empresas como Indra, que cada vez apuesta más por el negocio ferroviario, o Acciona también están analizando su participación.
Tanto Talgo como CAF buscan en el mercado exterior la oportunidad de poder vender sus nuevas joyas de la corona en alta velocidad. Mientras que la empresa fundada por los Goicoechea Oriol en los años cuarenta ya realiza pruebas de su nuevo AVE denominado Avril, CAF hace lo propio con el Oaris.
No lo tendrán nada fácil los fabricantes españoles de trenes porque otros rivales como la canadiense Bombardier también han anunciado su interés por lograr el concurso mexicano.