
El exsecretario del Partido Demócrata (PD) italiano Matteo Renzi se mostró hoy contrario a que su formación apoye un Gobierno del Movimiento 5 Estrellas (M5S), que a su juicio debe buscar el pacto con el otro vencedor, la coalición derechista.
"Una reunión con Di Maio sí, pero apoyar su Gobierno no", zanjó en el programa televisivo "Che tempo que fa", del canal público RAI, Renzi, que dimitió como líder de esa formación de centroizquierda tras perder las elecciones generales del pasado 4 de marzo.
El M5S, partido más votado en solitario, busca el apoyo del PD tras fracasar en su intento de pactar con la derecha, ya que solo gobernaría con la Liga Norte (LN) de Matteo Salvini pero excluyendo a Silvio Berlusconi, algo que la coalición conservadora no aprueba.
El PD, que desde un principio apostó por hacer oposición tras gobernar los últimos cinco años, ha convocado a su Ejecutiva el próximo 3 de mayo para debatir si inicia una negociación con el M5S.
En este sentido Renzi, que aunque dimitió sigue controlando una corriente importante, reapareció para adelantar que no apoyaría al M5S y consideró que "la pelota está en el tejado de la LN y del M5S" y "deben asumir la responsabilidad de Gobernar".
"No podemos con un truco regresar por la ventana después de que hemos perdido las elecciones. Si son capaces que lo intenten (el candidato del M5S, Luigi) Di Maio y Salvini", reclamó.
En caso de que Di Maio no logre el apoyo de Salvini, que se niega a abandonar su alianza con Berlusconi, Renzi trazó dos alternativas: o se convocan nuevas elecciones o se redactan normas nuevas.
Inmediatamente dejó clara su postura y rechazó unos nuevos comicios: "no sé si obtendrán más votos que antes pero si se vuelve a las urnas sería un tortazo gigante a los ciudadanos porque quienes han dicho 'hemos ganado' no han sido capaces de hacer nada".
Por ello avanzó la disponibilidad del PD a elaborar "juntos" unas nuevas normas que acaben con el bloqueo, como una nueva ley electoral o una reforma constitucional que permita la doble vuelta, algo que él ya propuso en diciembre de 2016 y precipitó su dimisión como primer ministro al perder el referéndum.
Esta situación de bloqueo se dio a raíz de que ningún partido obtuviera mayoría en las generales del 4 de marzo, en las que el M5S quedó como formación más votada pero superada por la suma de la coalición de derechas, liderada por la ultraderechista Liga Norte.
Di Maio reaccionó inmediatamente y lamentó que "el PD no logra liberarse de Renzi a pesar de que lo ha lastrado a su mínimo histórico recibiendo un varapalo clamoroso" en las elecciones.
"Más que una discusión interna en el PD, hoy hemos comprobado que aún lo decide todo Renzi con su ego desmesurado", dijo en Facebook.
"Lo hemos intentado todo para formar un Gobierno por el interés de los italianos y el PD ha dicho no a los temas por los ciudadanos y lo pagarán", vaticinó Di Maio, consciente de que la negativa de Renzi aleja sus posibilidades de gobernar Italia.