
El producto interior bruto (PIB) francés creció un 1,9% en 2017, lo que supone la mayor subida registrada en el país en seis años, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística (Insee).
La cifra supone una aceleración con respecto a los ejercicios anteriores, en particular el 1,1% de subida registrado en 2016. En los tres últimos meses del año pasado el crecimiento del PIB se aceleró, con un incremento del 0,6%, indicó el Insee, que revisó a la baja los datos del tercer trimestre, una décima menos de lo anunciado, hasta el 0,5%.
La cifra avanzada por Estadística es dos décimas superior a la que preveía el Gobierno en la ley de presupuestos. Las inversiones de las empresas aumentaron un 4,3%, nueve décimas más que en 2016, mientras que el gasto de los particulares subió un 5,1%, frente al 2,4% de 2016.
Las exportaciones subieron un 3,5%, tras el 1,9% del año anterior, mientras que las importaciones crecieron un 4,3%, frente al incremento del 4,2% del ejercicio precedente. En ese contexto, el saldo comercial influyó negativamente en crecimiento, restando cuatro décimas al PIB, la mitad que en 2016.
Las exportaciones seguirán impulsando a la economía francesa en los dos primeros trimestres de 2018, cuando el Insee avanza un avance del 0,5% y del 0,4% respectivamente.
En sus previsiones, Estadística augura un ligero descenso del desempleo en ese contexto para situarse a mediados del año próximo en el 9,4% de la población activa, tres décimas menos que la actual.