
La economía británica se expandió a un ritmo más rápido de lo estimado previamente al final del año pasado, impulsado por una fuerte mejora de las exportaciones.
El PIB entre octubre y diciembre creció un 0,6% trimestral, según la Oficina Nacional de Estadísticas, frente al 0,5% en la lectura previa y que coincide con el ritmo de crecimiento en el tercer trimestre.
Para 2014 en su conjunto, la economía creció un 2,8%, revisado al alza desde una estimación anterior de 2,6% y la mayor expansión desde 2006.
A cinco semanas de las disputadas elecciones nacionales, las cifras serán bienvenidas por el gobierno conservador de Gran Bretaña. La renta real disponible de los hogares aumentó un 2,3% en comparación con hace un año, la mayor tasa de crecimiento anual desde el inicio de 2010.
El déficit por cuenta corriente de Gran Bretaña redujo su saldo en el cuarto trimestre tras igualar su nivel más alto registrado en los tres meses anteriores. Sin embargo, para 2014 en su conjunto, el déficit aumentó a 5,5% del PIB, el mayor déficit desde que comenzaron los registros en 1948.
La oficina de estadísticas señaló que la mayor contribución al crecimiento en el cuarto trimestre provino de la balanza comercial, que ha supuesto un fuerte dolor de cabeza para Gran Bretaña en los últimos trimestres y que sumó 0,9 puntos porcentuales al crecimiento trimestral en el período - un brusco viraje desde el impacto negativo de 0,5 puntos porcentuales en el tercer trimestre.
El gasto de los hogares, que ha sido el principal motor de la recuperación económica de Gran Bretaña, añadió 0,4 puntos porcentuales al crecimiento en el trimestre, una leve desaceleración.
La confianza del consumidor británico subió a su nivel más alto en más de 12 años este mes, según mostró el martes un estudio del instituto GfK.