
A finales de 2008, la Comisión Europea decidió incluir en su hoja de ruta a las pymes, un colectivo "que genera el 80% del empleo en el mercado común y que está compuesto por 23 millones de empresas", tal y como detallaba Daniel Calleja, director de la Estrategia europea de las pymes, durante la presentación del Informa de aplicación de la Small Business Act en España.
Y es que precisamente a finales de 2008 la Unión Europea decidió formalizar su apoyo a las pequeñas y medianas empresas mediante la aprobación de la Small Business Act, una directiva no obligatoria encaminada a que cada Gobierno de los estados miembro impulsaran el tejido empresarial y productivo de los emprendedores y las pymes.
¿Qué consecuencias ha tenido esta directriz en el mercado español? Calleja asistía esta semana a la presentación del informe que ha sido elaborado por la Dirección General de la Pyme (órgano dependiente del Ministerio de Industria) y que recoge todas las iniciativas y modificaciones en el marco regulatorio aprobadas en España en los últimos dos años en esta dirección. "La Comisión Europea se ha marcado tres prioridades: reducir la burocracia, facilitar el acceso al crédito y promover la internacionalización", indicó Calleja, quien calificó las medidas adoptadas en España como "un progreso importante, sobre todo en lo que respecta a la morosidad y la reducción de costes para la creación de empresas".
Mr. Pyme, como se le conoce en el seno de la Comisión Europea, se encuentra en fase de recopilación de todas las medidas adoptadas por los diferentes países en apoyo a las pymes, para su discusión el próximo 24 de septiembre. Esta semana le tocaba el turno a España de presentar las suyas.
Administración electrónica
El Ministerio de Industria, a través de la Dirección General de la Pyme, ha contabilizado en 100.000 millones el impacto que han generado las distintas normativas aprobadas en favor de pymes y emprendedores, poniendo el énfasis en "los progamas de avales y líneas de financiación a través de Cersa y Enisa (más de 700 proyectos por un importe de 30 millones) y la posibilidad de constituir una empresa de hasta 30.000 euros de capital social en menos de 5 días y por 250 euros", según desveló Estela Gallego, directora de la Dgpyme.
Según valoró la propia Gallego, "hemos centrado esfuerzos en cuatro áreas fundamentales: emprendedores, simplificación administrativa, financiación e impulso de la competitividad".
El informe elaborado por la Dgpyme subraya algunos avances obtenidos en los últimos dos años en estos cuatro puntos. Uno de ellos tiene que ver con la administración electrónica: "Ya se puede hacer el 97% de los trámites con la Administración central por vía electrónica", afirmó Gallego. Además, "también se han reducido los trámites y plazos para constituir una sociedad limitada por esta vía, de tal forma que desde diciembre esposible crear una empresa en menos de cinco días y con un coste de 250 euros, siempre y cuando su capital social sea inferior a 30.000 euros".
En materia de financiación, Industria destaca como avance la rebaja fiscal en el impuesto de Sociedades aprobaba para las empresas que facturen menos de 5 millones de euros al año, que podrán tributar al 20%.
Colaboración con Cepyme
La presentación del informe ante la Unión Europea también contó con la presencia de Jesús Terciado, presidente de Cepyme, quien valoró la transformación del nuevo Instituto de Comercio Exterior (Icex) "para mejorar el acceso de las pymes a la internacionalización", y pidió que "el acceso a la financiación" sea "una línea de actuación prioritaria".
Terciado también aprovechó para resaltar que "hemos firmado un convenio con el Gobierno para avanzar en el objetivo de que se pueda crear una pyme en 3 días, con tres trámites y con 100 euros".