La Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (Acea) considera que la concesión de "créditos blandos" por importe de 5.000 millones de euros que podrá recibir la industria europea de automóviles para invertir en tecnologías limpias, "es un primer paso" para prevenir las consecuencias de la actual crisis económica y de la continua bajada de las ventas de automóviles en el continente.
"Las instituciones y los gobiernos de la UE necesitan actuar y la urgencia es clave. El marco propuesto esta mañana necesita ser trasladado con rapidez a medidas concretas y efectivas para ayudar a la industria que está en grave peligro", explicó el presidente de Acea, Christian Streiff.