Poco a poco se van conociendo detalles sobre los test de estrés a los que someterá a muchas entidades europeas. Así, según fuentes conocedoras de los detalles de las pruebas, los reguladores bancarios europeos habrían comunicado a los bancos implicados que deberán depreciar un 17% los bonos griegos que tengan en el balance, y un 3% los españoles.
Sin embargo, no habrá recortes, tal como se barajaba, en otros títulos, como la deuda alemana. De momento, no hay muchos más datos, ya que el Comité de Supervisores Bancarios Europeos (CEBS) está aún barajando qué datos hacer públicos y cuándo.
Los reguladores de la zona euro cuentan con que los resultados de los test sirvan para convencer a los inversores de que los grandes bancos de la región están en condiciones de afrontar un eventual default de algún país miembro.
