La partida de gasto pone en evidencia puntos muy débiles de nuestra economía, el crecimiento en gasto viene con las pensiones.
El Gobierno presentó ayer sus presupuestos para 2014 que utilizando las palabras de Rajoy, deberían ser los presupuestos de después de la recesión pero sin olvidar la crisis. Lo más positivo es la elevación de las cifras de crecimiento de la economía española, algo posible dadas las cifras de la balanza exterior y por un frenazo de la caída de la demanda privada. Sin embargo, el raquítico crecimiento difícilmente permitirá una rebaja sustancial del paro. También positivo el epígrafe de los intereses. Contaremos con ahorro importante, gracias a la evolución de los diferenciales de los instrumentos de financiación del tesoro, combinado con una política laxa del BCE, pero el nivel de deuda sobre PIB, no deja utilizar esta disminución para políticas de crecimiento.
En la partida de ingresos se prevé recaudar más, eso sí, bajo la estructura actual. Los recargos actuales se mantendrán, se prevén aumentos de la tributación principalmente por eliminación de deducciones en el Impuesto de Sociedades, recalificación del IVA y recuperación económica. Señalar que nuestra carga fiscal es ya una de las más altas de los países europeos, además es necesario una revisión de nuestro sistema impositivo, sistema que carga la tributación en el trabajo por cuenta ajena. Si lo que se quiere es apoyar el crecimiento, bueno sería una rebaja de los impuestos, pues la reducción del gasto público solo se ha centrado en recortes y no en adelgazar instituciones, personal a dedo, cierre de empresas públicas ruinosas, sinergias y demás actuaciones que no ha acometido. Veremos si ante posibles desvíos negativos no hay subidas de impuestos, algo a lo que Montoro nos tiene acostumbrados.
La partida de gasto pone en evidencia puntos muy débiles de nuestra economía, el crecimiento en gasto viene con las pensiones. El Gobierno tiene la obligación y la urgencia de poner en orden las pensiones y un equilibrio sostenible de las mismas. Ya ha llevado a cabo la comisión de expertos, tiene el informe encima de su mesa y debe de actuar responsablemente y con visión de largo plazo; el factor de sostenibilidad endulza un poco la evolución pero la tendencia sigue siendo de fuerte incremento en gasto de pensiones. La caída de las prestaciones por desempleo me hace ser pesimista en cuanto a la evolución de la morosidad bancaria, pues ante falta de prestaciones se dejarán de pagar hipotecas. Los funcionarios en la nevera, congelados, aunque con paga extra. Para Fomento todo hace prever también la congelación. Lo dicho: presupuesto de crisis.