
Bank of America, el mayor banco de Estados Unidos por activos, se anotó entre octubre y diciembre de 2008 unas pérdidas de 1.790 millones de dólares, o 48 centavos por acción. La entidad, que registra sus primeros números rojos en 17 años, ha anunciado que recortará el dividendo, después de haber recibido una inyección de liquidez de EEUU por valor de 20.000 millones de dólares.
El resultado es mucho peor de lo que esperaban los analistas, que habían estimado unas pérdidas de 24 centavos por título, según el consenso de expertos recogido por FacSet Research. Además, contrasta con las ganancias de hace tansólo un año: en el mismo periodo de 2007, Bank of America (BAC.NY) alcanzó un beneficio neto de 268 millones de dólares.
Rescate de EEUU
La presentación de resultados de hoy, que en un principio estaba prevista para el 20 de enero, ha coincidido con el rescate de la entidad por parte de las autoridades estadounidenses. Hoy, la Reserva Federal estadounidense (Fed), el Tesoro y la FDIC han comunicado una ayuda por valor de 20.000 millones de dólares a cambio de acciones preferentes.
Además, el Gobierno de EEUU avalará activos por valor de 118.000 millones de dólares para ayudar al gigante bancario a absorber la compra de Merrill Lynch, operación que se encuentra en proceso actualmente.
De hecho, Bank of America ha adelantado también las cuentas de Merrill del último trimestre de 2008, que según ha indicado registrarán unas pérdidas de 15.310 millones. BoA ha especificado que los resultados de la entidad que está adquiriendo no se reflejan en sus resultados.
Según indica Bloomberg, las malas noticias generadas hoy por Bank of America ponen en tela de juicio al consejero delegado de Bank of America, Ken Lewis, -nombrado banquero del año el pasado mes de diciembre por la revista estadounidense American Banker-, y podrían hacer peligrar su permanencia en el puesto.
Los títulos del banco se han desplomado un 75% desde que anunció la absorción de Merrill Lynch en septiembre.