Desde su puesto al frente de la patronal aseguradora, Pilar González de Frutos afronta hoy la segunda asamblea de Unespa de este año con el sector asegurador afectado, como casi todos, por la crisis. Pero, según ella misma reivindica, "mucho menos que otros". Sin ir más lejos, el impacto de las aseguradoras en el caso Madoff "es menor": son "sólo dos millones desobre los 170.000 gestionados", señala.
Solbes asegura que el impacto del caso Madoff en las aseguradoras asciende a dos millones. ¿Podría ser que, tras las investigaciones, esa cifra fuera mayor?
Creo que es un impacto limitado, ya que son dos millones sobre un total de 170.000 gestionados. Además, son sólo tres compañías, de las que Unespa desconoce la identidad. Probablemente se trata de inversiones que forman parte de un producto estructurado. Estoy convencida de que, a pesar de que puedan irse depurando más las cifras, no aparecerá mucho más. Hemos conseguido desesperar a algunos intermediarios porque no conseguían colocar este tipo de productos en los seguros españoles.
También trae desconfianza en el sector, y en un momento delicado.
Sin duda. Pero, hay que ver las cosas en sus justos términos. No sería razonable un impacto sobre el conjunto del sector con la tradición de prudencia que éste tiene.
Axa ha cifrado el impacto en sus cuentas de la estafa por debajo de los 100 millones. ¿Afecta más el caso Madoff a las empresas extranjeras que operan en España?
No se puede hacer un perfil con tres compañías sobre 300. El impacto lo encajan los fondos propios de la entidad, su patrimonio, sin que llegue a los clientes. Además, las aseguradoras europeas están sometidas a normas homologables.
¿Qué se puede hacer para evitar los fraudes? ¿Puede pasar aquí?
Me gustó mucho la reacción de Strauss-Kahn cuando dijo que es difícil evitar que haya ladrones en el sistema pero, ¿dónde estaba la policía? Estas situaciones son las que justifican una supervisión permanente en el ámbito financiero. Tenemos una policía independiente y profesional. La supervisión en España y Europa es buena comparada con la de otros mercados.
¿Mejor que la de EEUU?
Claramente, sí.
Cisne puede acabar siendo liquidada. ¿Están ustedes preocupados por alguna otra entidad?
El hecho de que una entidad se liquide no significa un quebranto para los clientes. Tenemos un sistema de protección para los clientes y los acreedores que es garante. En los últimos años, ha permitido que cualquier acreedor por razón de póliza haya cobrado el 100 por cien del nominal de su crédito en un tiempo breve. No estoy preocupada por ninguna aseguradora.
Fortis ha anunciado que liquida su gestora en España. ¿Podemos asistir a episodios similares, en los que bancos extranjeros afectados por la crisis se marchen?
Desde que rompiera su alianza con La Caixa, hace unos meses, Fortis apenas mantenía actividad aseguradora en España. Cuando los recursos son más justos, los gestores toman este tipo de decisiones.
¿Podría producirse un movimiento de concentración por la crisis?
Todo puede ser, pero yo creo que no. El sector tiene unos ciertos componentes anticíclicos que ayudan en las épocas más duras. Estamos afectados por la crisis, pero menos que otros sectores. Funcionamos con la liquidez de nuestros clientes, no tenemos problemas de acceso al crédito y hemos sido prudentes en nuestras provisiones.
¿Ha subido el fraude?
No, todavía. Pero, tradicionalmente, en épocas de crisis crece el volumen de fraude. Sería deseable que no se produjera, sobre todo, porque el fraude no es de un cliente a la aseguradora, sino de éste a los demás clientes.
¿Por qué?
Se suben las cuotas o, al menos, se impide una reducción del precio. Si crece la siniestralidad, ésta se financia con las primas. Y cuando hay un fraude es lo mismo. Los seguros se encarecerán por el previsible fraude que traerá la crisis.
¿En qué ramos del negocio está teniendo la crisis mayor impacto? ¿En los seguros, por ejemplo, más ligados a la construcción?
En estos últimos es verdad que se nota un descenso de la facturación. Además, hay un deterioro del resultado en crédito, que es normal porque está relacionado con las insolvencias. Pero para eso se dotaron las provisiones específicas en la época de vacas gordas. Los reaseguradores están estableciendo restricciones en nuevos contratos, así como subiendo los precios. Y los empresarios son los que lo notan.
Vamos, que sufren un estrangulamiento doble. Por un lado, el cierre de la banca y, por otro, que los seguros sean más selectivos...
Exacto, pero las aseguradoras deben salvaguardar sus intereses: no van a asumir riesgos que les van a fallar frente a otros que cumplen.
Por otra parte, parece que vida sube por encima del sector, pero el ahorro gestionado no se mueve. ¿Es un crecimiento ficticio?
Sí, hay un cierto estancamiento. Incluso se está adelgazando el negocio. Ello es debido a que muchas operaciones entran y salen.
¿Y en autos?
Hay una competencia feroz. Las políticas de seguridad vial adoptadas por el Gobierno están recortando la siniestralidad. Y si va mejor, el resultado se traslada in- mediatamente al cliente, que es el gran beneficiado de la situación. En valores constantes, las cuotas están en términos equivalentes a las de 1995. Ahí se ve el esfuerzo por trasladar las mejoras al cliente.
¿Los treintañeros de hoy, pueden aspirar a tener una pensión de similares prestaciones a las actuales? ¿Cree inevitable aumentar la edad de jubilación?
Sí, si por equivalente se entiende un sistema de reparto. Lo que no se va a mantener es el nivel de cobro en el 80 por ciento del último sueldo. Hay alternativas: bajar esa tasa, prolongar la vida laboral, tener en cuenta toda la cotización... Si no afrontamos estos cambios dejaremos una deuda insoportable a nuestros hijos. En cualquier caso, siempre habrá una pensión pública y así lo defendemos.
El director general de Seguros, Ricardo Lozano, declaró a elEconomista que la idea de crear una supervisión única financiera, aunque dividida en transparencia y solvencia, sigue en la agenda. ¿Cómo valora esta propuesta?
Es más importante cómo se realiza la supervisión que quién lo hace. Lo que es seguro es que hay que cambiar al supervisor para que sea independiente, ya que desde un punto de vista formal Seguros pertenece al Ministerio de Economía.