
El precio de la bombona de butano subirá el próximo martes un 2,1 por ciento hasta los 14,45 euros por cada botella frente a los 14,15 euros que costaba anteriormente, es decir, un incremento de 30 céntimos por cada 12,5 kilogramos. El incremento se produce tras la fuerte subida que ha experimentado la materia prima, que ha subido un 17 por ciento.
Pese a esto, en relación con el precio de la electricidad, el principal sustitutivo, la bombona de butano sigue teniendo un coste muy por debajo incluso que el del bono social, según indican fuentes del sector consultadas por este diario, lo que hace que los márgenes sean muy ajustados y apenas se pueda innovar en el servicio o en la atención al cliente.
A lo largo de los últimos meses se han producido constantes subidas pero que apenas han logrado compensar la situación en la que vivía el sector que durante varios ejercicios estuvo vendiendo a pérdidas. Fruto de aquella situación, el Consejo de Ministros tuvo que aprobar ayer un crédito extraordinario de 100 millones de euros para el presupuesto del Ministerio de Energía destinado al pago de una sentencia de la Audiencia Nacional relativa a la indemnización en concepto de daños y perjuicios a Repsol Butano, quien interpuso recurso contencioso-administrativo por los daños y perjuicios causados por la aplicación de la Orden ministerial que actualizaba el sistema de determinación automática de precios máximos de venta de los gases licuados del petróleo envasados, incluyendo el "Factor de ponderación" y la posibilidad de revisión de precios cada tres meses.
Estas indemnizaciones también han ido a otras petroleras y han alcanzado ya los cerca de 200 millones de euros.
Ante esta situación, la Asociación Española de Operadores de Gases Licuados de Petróleo ha reclamado la liberalización del sector al Ministerio de Energía. La patronal indica que no hay barreras de entrada al mismo y denuncia que España vive una situación anacrónica como único ejemplo de país con precio regulado.
Para las compañías del sector, el butano ha dejado de tener el carácter social que anteriormente se le atribuía ya que en estos momentos los usos ya van también a negocios como las terrazas con importantes márgenes.
La AOGLP ha solicitado un informe a la Comisión Nacional de Mercados y Competencia sobre la situación de este sector. En España hay unas ventas de 1.440 millones de toneladas de gases licuados de petróleo. De envasado alrededor de 880.000 toneladas -unos 70 millones de bombonas de 12,5 kilos- y el número de clientes puede rondar los siete y ocho millones. En granel, las ventas ascienden a 530.000 toneladas y en autogas un total de 47.000 toneladas en las 557 estaciones que ya disponen de este servicio y que poco a poco siguen creciendo.