
El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, se ha mostrado hoy abierto a que algunas empresas en crisis puedan aplazar el pago de las cuotas de la Seguridad Social (SS), como un mecanismo de ayuda para superar momentos puntuales de crisis económicas. Respecto a esta posible medida ha querido puntualizar que "se trataría de estudiar caso por caso" y "evidentemente con mucha transparencia".
"Estamos abiertos, en algunos casos concretos, al pago diferido de las cuotas de la Seguridad Social en caso de que la empresa se encuentre en peligro, que es algo que sí depende de mi ministerio", según ha señalado hoy el ministro.
Corbacho se ha reunido esta tarde en Barcelona con la consejera de Trabajo, Mar Serna, para analizar la situación de pérdidas de puestos de trabajo, el grupo especial para coordinar los ERE que ha creado la Generalitat y la implementación de políticas activas.
"Caso por caso"
Tras este encuentro, Corbacho ha atendido a los medios y ha dejado muy claro que "se trataría de estudiar caso por caso" y ha señalado que sería clave "que se afrontase como una solución temporal para hacer frente a problemas de coyuntura".
"Tiene que ser una solución individual y evidentemente con mucha transparencia", ha asegurado hoy el ministro al analizar una propuesta que le hizo la patronal Pimec en un carta firmada por el presidente de esta organización, Josep González, esta misma semana.
En todo caso, el ministro ha descartado que se pueda hablar de una moratoria para el pago de cuotas de la Seguridad Social de las empresas. Según Corbacho, "en ningún caso se puede generalizar una solución de este tipo porque la cuota de la Seguridad Social es el pilar del sistema, y no se puede hacer nada que haga peligrar el conjunto del sistema".
La consejera de Trabajo ha pedido a Corbacho que traspase a las comunidades autónomas las políticas activas de empleo y el ministro ha recogido el guante asegurando que "en este momento hacen falta menos normativas y más flexibilidad para adaptarse a un entorno muy cambiante".