
El Mercado Alternativo Bursátil (MAB) ha superado en sus años de vida una gran recesión económica y un escándalo que puso en tela de juicio su transparencia como mercado, como fue el caso Gowex.
Ahora, después de que esta plataforma de inverisón se haya recuperado completamente y afronte el mejor momento de su historia, su vicepresidente, Jesús González Nieto, se enfrenta a otra batalla: conseguir incentivos fiscales que potencien el mercado.
El MAB para empresas ha cumplido ocho años. ¿Cuál es su balance?
Nuestra valoración es muy positiva. Es un logro tener 39 compañías en el mercado de empresas en expansión y el boom del segmento de socimis. Todas las compañías han ampliado capital y se han seguido financiando. Ha habido 123 operaciones de ampliación de capital, una media de cuatro por compañía y han captado 900 millones de euros.
¿El MAB se ha recuperado definitivamente del caso Gowex?
Por supuesto que se ha superado. El caso Gowex fue en verano de 2014, y en los últimos dos años ha habido hasta 64 ampliaciones de capital. En aquel momento, había 24 compañías y ahora hay 39, por lo que el número ha crecido mucho y se han seguido dando casos de éxito como Másmóvil o Inkemia. El caso Gowex nos ha hecho daño, pero también nos ha hecho aprender.
¿Cree que hace falta más pedagogía a los inversores sobre el MAB?
El tipo de inversor que buscamos es cualificado. O tiene una cualificación y es responsable asumiendo el riesgo, o se pone en manos de un gestor profesional. No es un mercado para invertir a ciegas. Últimamente están entrando muchos inversores muy cualificados en small caps, este es el futuro.
¿Cómo cree que afectará la supresión de incentivos en Cataluña?
Es un error garrafal, ya que estos incentivos son muy importantes.
¿Estos incentivos habían dinamizado a los inversores?
Esto no es algo que beneficie a los inversores, se puede vender la versión perversa de que "con el dinero de todos se ayuda a los inversores, que son especuladores", pero quien está creando empleo y pagando impuestos son las empresas.
¿Qué efecto podría tener?
Cambiar el domicilio no es tan difícil. Hay muchas empresas que no son tan pequeñas, y si necesitan financiarse sí o sí, no sólo tienen Madrid, sino que pueden mudarse a Aragón. Al final, el MAB está enfocado también a pequeños inversores. El señor que tiene 100.000 euros y no sabe donde ponerlo, pierde ese incentivo y pondrá el dinero en otro sitio... . Por nuestra parte, ahora que hay Gobierno, vamos a pedir que estos incentivos sean a nivel nacional. Estamos en desventaja competitiva con otros países que sí lo tienen; Inglaterra, por ejemplo, tiene 160 empresas fruto de los años, pero también de incentivos.
¿La ausencia de incentivos no puede provocar fugas al extranjero?
Es posible que algunos lo planteen, pero no es fácil montar una estructura societaria en el extranjero. Si no encuentran financiación aquí, se irán a otro sitio. En Inglaterra tienen mayor experiencia, hay una masa crítica, pero por nosotros, si es para que crezcan, no lo vemos mal.
¿Qué elementos necesita el MAB para acercarse al AIM inglés?
Otro elemento interesante, que en España no existe, es el de los vehículos de inversión especializados. En Francia, Inglaterra... hay fondos que sólo invierten en microcaps con una legislación particular. Y ese fondo tiene que invertir un porcentaje muy mayoritario en estas firmas.