La consejera de Economía de Castilla y León, Pilar del Olmo, aseguró ayer que el principal reto del Gobierno autonómico en materia industrial es aprovechar la salida de la crisis y la consolidación económica para impulsar la transformación digital del sector a la llamada industria 4.0.
Del Olmo, que clausuró en Valladolid la jornada Castilla y León. Un nuevo impulso al sector industrial, organizada por elEconomista con el patrocinio de la Junta de Castilla y León, Renault, Grupo Norte y KPMG, aseguró que en estos momentos el sector industrial se encuentra en una "encrucijada" y que todos los planes que el Gobierno regional tiene puestos en marcha, así como futuras estrategias, tienen como objetivo primordial la adaptación del tejido industrial a las nuevas tecnologías y a la innovación.
En este sentido, Del Olmo anunció la creación dentro de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos de un grupo de trabajo formado por las Consejerías de Economía y Hacienda, Fomento, Educación, Agricultura y Empleo para coordinar todas las actuaciones del Ejecutivo regional hacia el "salto digital" del tejido productivo de la región.
Entre esas actuaciones se encuentra el Plan de Promoción Industrial, que se aprobará "en breve" y que persigue el máximo consenso político o la recién presentada Estrategia de Emprendimiento e Innovación, que supondrá una inversión directa de unos 600 millones de euros e inducida de 900.
"Vamos hacia otro modelo económico basado en la generación de conocimiento", advirtió Del Olmo, quien reclamó la "participación de todos los sectores industriales" en el objetivo de la Industria 4.0. Del Olmo subrayó la "buena salud" de la economía de Castilla y León, sustentada en datos como el crecimiento de un 3% del PIB regional en 2015, del que ha sido protagonista el sector industrial y, más en concreto, el sector manufacturero, con subidas de un 4,4% en 2015 y de un 7 en el primer trimestre de este año.
Además, el Indice de Producción Industrial ha crecido un 6,6% hasta septiembre, tres veces más que la media nacional. De entre las cifras aportadas por Del Olmo destaca el crecimiento del 12,3% de las exportaciones frente a tan solo un 2% nacional. "Quien cuenta con un sector industrial fuerte tiene más estabilidad en la economía", subrayó la consejera, quien ha definido al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, como un "gran impulsor de la industria".
Entre las actuaciones puestas en marcha por Herrera, Del Olmo se refirió al III Acuerdo Marco de Competitividad, cuyo objetivo está en lograr que el peso del sector manufacturero, que ahora aporta un 16,3% del VAB, alcance el 20% en 2020.
Previa a la intervención de Del Olmo los empresarios José Rolando Álvarez, presidente de Grupo Norte; Juan Miguel Martínez Gabaldón, director general de Gullón; Ginés Clemente, consejero delegado de Aciturri; Javier Gallo, director general de Gadea-AMRI, y Félix Moracho, presidente de la Asociación Alimentaria de Castilla y León (Vitartis) coincidieron durante una mesa de debate en reclamar la implicación de "todos", desde las universidades hasta las propias empresas, pasando sobre todo por las Administraciones Públicas, para impulsar un plan estratégico a largo plazo que genere un ecosistema capaz de favorecer la competitividad del sector.
"Escenario apasionante"
Se están produciendo cambios desde el punto de vista tecnológico y de la comunicación "como nunca en la historia de la humanidad", cambios que abren un "escenario apasionante" y "eso es de lo que se trata ahora, de ver cómo vamos a gestionarlos", apuntó el presidente de Grupo Norte, José Rolando Álvarez.
La Comunidad "tiene los recursos", incidió antes de enumerar "las universidades, un porcentaje de gente estudiando mayor que nunca, recursos esenciales como el agua, un medio ambiente maravilloso, una situación geográfica privilegiada, recursos humanos y financieros?"; lo tiene "todo menos el plan", aseguró el máximo dirigente de la empresa de servicios.
"Convencernos de que lo tenemos todo sin morir de un ataque de importancia" y, con ello, "no tener miedo a los cambios, sino ser partícipes de ellos" fue la receta que también apuntó el consejero delegado de la aeronáutica Aciturri, Ginés Clemente, quien aseguró echar en falta que en ocasiones el empresariado industrial no se sienta partícipe de los cambios precisamente por la ausencia de un plan estable y a largo plazo.
Asimismo, demandó un "marco estable", con una regulación clara en áreas, por ejemplo, como la relativa a los costes energéticos, Juan Miguel Martínez Gabaldón, director general de Gullón, galletera que ha generado en la comarca norteña palentina de Aguilar de Campoo 1.300 empleos.
"Los dirigentes políticos tienen que darse cuenta de que deben reactivar la industria con medidas fiscales y potenciando las infraestructuras", apuntó Gabaldón antes de señalar que, en el contexto de ese marco estable, el empresariado debe responder con inversiones, "para crear empleo, que es, en definitiva, el gran objetivo".
Más allá de esta demanda, de la mesa redonda salieron otras dos grandes exigencias a las Administraciones Públicas y fundamentalmente a la Junta de Castilla y León: que favorezcan la simplificación burocrática, y que "vendan" la Comunidad y "vendan país" fuera de una forma efectiva para la atracción de inversores.
En este aspecto incidieron el director general de Gadea-AMRI, Javier Gallo, y el presidente de Vitartis, Félix Moracho, después de que Martínez Gabaldón apuntara que "España no puede estar en el puesto 44 como escenario de inversiones".
No se quedaron en las exigencias los representantes de la industria regional en esta mesa redonda y, más allá de ellas, también remarcaron durante sus intervenciones el compromiso del sector con la innovación, la internacionalización, la formación interna y la colaboración entre todos los eslabones de la cadena industrial como claves también para esa mejora de su competitividad.
Ante un nutrido auditorio con representación de los estamentos empresarial, económico, social y político de la Comunidad, pusieron el foco de un modo especial en el primero de esos aspectos, la innovación, no ya sólo en producto, sino en áreas como las de distribución o mercados, como gran elemento de competitividad.
En este sentido, Martínez Gabaldón subrayó la importancia de este factor ejemplificando el caso de Gullón, que gracias a la innovación "ha encontrado el camino del éxito en España" y, cuando ha salido a los más de 100 países en los que está presente, se ha encontrado mucho más adelantada que la industria alimentaria local.
La Jornada Empresarial con la que elEconomista celebró sus diez años de existencia fue presentada por el director del periódico, Amador G. Ayora, y contó además con la ponencia inaugural de Miguel Ángel Faura, socio responsable de Enterprise de KPMG, quien avanzó un nuevo entorno para la industria con nuevos retos y en el que no valdrá la estrategia continuista sino la anticipación. Un modelo financiero con equilibrio entre el capital propio y ajeno, la internacionalización y la innovación serán claves, remarcó, en ese nuevo escenario que debe llevar a la industria a dar un gran salto tecnológico, a transformarse en una industria 4.0, para poder crecer en tamaño y hacer frente a la competencia global de forma eficiente.
A este mismo nuevo escenario se refirió en la apertura de la cita la presidenta de la Asociación Vallisoletana de Empresarios, Ángela de Miguel, para quien se abre una etapa de retorno de empresas más automatizadas, que "van a crear menos empleo del que estamos acostumbrados, pero empleo basado en el talento".
Menos burocracia
En este sentido, aseguró que hay que estar preparados y adaptar la burocracia y la ordenación urbanística para favorecer la implantación de estas compañías que son medioambientalmente no contaminantes.
De Miguel reclamó asimismo una reducción de los trámites administrativos para los empresarios, apoyar no sólo a los emprendedores, sino a las compañías que ya están funcionando y una disminución de algunas de las cargas más importantes que tiene la industria, como son los costes energéticos.
