
El relevo en la presidencia ejecutiva de Telefónica se producirá el próximo 8 de abril. Ese día, César Alierta cederá el mando a José María Álvarez-Pallete, actual consejero delegado, por lo que se abrirá una nueva etapa en la multinacional española. La entrega del testigo se produce en lo más alto de la compañía.
La designación de José María Álvarez-Pallete se decidió hace algo más de tres años, en 2012, cuando el primer ejecutivo designó al que ahora se perfila como su delfín como consejero-delegado, iniciando así un proceso que concluirá el próximo 8 de abril con su nombramiento como Presidente Ejecutivo.
José María Álvarez-Pallete (1963) es licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad Libre de Bruselas. "International Management Program" por IPADE y Diploma de Estudios Avanzados por la Universidad Complutense de Madrid.
Con tan sólo 35 años, Álvarez Pallete se incorporó a Telefónica como Director General de Finanzas de Telefónica Internacional. Fue en febrero de 1999 y procedía de CEMEX. Meses más tarde pasó a ocupar la Dirección General de Finanzas Corporativas. Con la llegada de Alierta a la Presidencia en el año 2000, fue confirmado en su puesto y, posteriormente, en el 2002 designado Presidente de Telefónica Internacional y luego Presidente de Telefónica Latinoamérica, cargo que ocupó hasta su nombramiento como Presidente Ejecutivo de Telefónica Europa en 2011.
Un año después accede al cargo de Consejero Delegado de Telefónica S.A., habiendo sido miembro de Consejo de Administración desde julio de 2006. Con estas credenciales y tras asumir a nivel global el día a día de las operaciones desde su posición como Consejero Delegado de la Compañía, Alierta ha considerado a Álvarez-Pallete como el directivo mejor preparado para favorecer el relevo y posicionar una vez más a Telefónica en la vanguardia, esta vez del sector digital.