
Isolux Corsán registró una pérdida neta de 19,9 millones de euros en los nueve primeros meses, lo que supone elevar en un 18,6% los 'números rojos' contabilizados un año antes, por el efecto de la cancelación de dos proyectos que tenía en Brasil, informó la compañía.
La suspensión por parte del país latinoamericano de estos proyectos, parte de una línea de metro y una carretera, también impactó en el beneficio bruto de explotación (Ebitda) de la compañía que preside Luis Delso.
En concreto, la cancelación de estas obras restó 34 millones de euros a esta partida que, de esta forma, se situó en 115 millones al cierre de septiembre, un 38% menos que un año antes.
Por contra, los ingresos de Isolux Corsán crecieron un 2% entre los pasados meses de enero y septiembre, hasta sumar 1.580 millones de euros, gracias a su "fuerte y creciente actividad internacional".
Latinoamérica se mantiene como primer mercado de la compañía, dado que genera más de la mitad (el 56%) de los ingresos de su división de construcción y energía, por delante de España, que aporta un 15%, Asia (13%) y la zona de Oriente Medio y Asia, con otro 11%.
La compañía logró nuevos contratos por valor de 1.798 millones de euros entre los pasados meses de enero y septiembre, con lo que al cierre de este periodo contaba con una cartera de proyectos pendientes de ejecutar por unos 7.000 millones de euros, un 5% superior a la de un año antes.