
La compañía Petróleos Mexicanos (Pemex) anunció ayer la adjudicación de dos contratos a ACS y Técnicas Reunidas para aumentar la producción de combustible limpio en las refinerías de Minatitlán (al sur de Veracruz en México) y Tula (en el centro del país) por 872 millones de euros.
Esta operación se enmarca en el Proyecto de Calidad de los Combustibles en su fase diésel para las refinerías de Madero, Salamanca y Salina Cruz -a las que hay que sumar las anteriormente citadas- en el que se estima que inviertan 2.800 millones de dólares (unos 2.163 millones de euros).
En particular, el resto de empresas contratadas fueron Ica Flúor Daniel (para la refinería de Madero), Samsung Engineering (en Salamanca) y Foster Wheeler USA Corportation (para Salina Cruz).
Así, el director general de Pemex, Emilio Lozoya Austin, señaló durante la presentación de estos proyectos que el objetivo es reducir el 97 por ciento el contenido de azufre en diésel para cumplir con las normas ambientales implantadas en México -al pasar de 500 a 15 partes por millón-.
Además, el director general de la petrolera estatal aseguró que mejorarán la calidad del aire al reducir la emisión de gases de efecto invernadero en más de 12.000 toneladas anuales.
Según las estimaciones de Lozoya, en esta fase del proyecto se generarán alrededor de 12.000 empleos directos y 31.000 puestos de trabajo indirectos. Esto, en palabras del director general de la petrolera estatal azteca, "tendrá un incremento de la demanda de mano de obra en las localidades de cada una de las refinerías y se dará impulso tanto a la industria de la construcción como a fabricantes de equipos y a empresas que presten servicios".
En la actualidad, la petrolera estatal ya produce unos 100.000 barriles diarios de gasolinas que cumplen la norma relativa del azufre y se prevé que en 2015 se alcance el 100 por ciento de la producción total. El director general de Pemex Refinanciación, Miguel Tame Domínguez, explicó que con el diésel de ultra bajo azufre (UBA) los fabricantes de automóviles y camiones podrán producir vehículos equipados con motores mejor diseñados para el uso de este combustible de alta calidad -lo que generará un ahorro de hasta el cinco por ciento, la reducción del 20 por ciento de los contaminantes y el incremento en la vida útil de las unidades en otro 20 por ciento-.
Más inversión
A la apuesta por los combustibles limpios se une la inversión de la petrolera azteca en la fase dos del gasoducto Los Ramones para el transporte de gas natural desde el norte al centro del país con una capacidad adicional de 1.430 millones de pies cúbicos diarios y con una inversión de unos 2.500 millones de dólares (unos 2.000 millones de euros, aproximadamente).
En esta etapa, el gaseoducto tendrá una longitud de 741 kilómetros y cruzará los estados de Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Quétaro y Guanajuato.
Al hilo de esto, Lozoya indicó que la fase I del gaseoducto que se encuentra en construcción "marcha en tiempo y en forma, por lo que su entrada en operación será en diciembre de este año". Además, destacó que Los Ramones será la "columna vertebral" del Sistema Nacional de Gaseoductos, generará 5.000 empleos directos y 15.000 indirectos y garantizará la seguridad energética de México con cerca del 40 por ciento de la capacidad de transporte de gas natural.
Agro Nitrogenados se lava la cara
Otra de las novedades que adelantó el director general de la petrolera azteca, Emilio Lozoya Austin, fue que se rehabilitará la empresa Agro Nitrogenados por 200 millones de dólares (unos 154 millones de euros, aproximadamente). La adquisición de esta compañía el pasado marzo fue muy polémica ya que la planta llevaba más de 14 años parada y su maquinaria se encontraba en un avanzado estado de oxidación -los políticos aseguraban que habían comprado "chatarra"-.
Sin embargo, la filial de Pemex que la adquirió (PMI) se gastó 475 millones de dólares (unos 350 millones de euros), cifra que supone casi el doble de lo que se destinó al complejo de Pajaritos por parte de Antonio del Valle. Pero éste no es el único dato que llamó la atención a los ciudadanos mexicanos.
El vendedor de esta planta era Xavier Autrey Maza, el tío de Arturo Henríquez Autrey -el actual director corporativo y de Procura y Abastecimiento de Pemex, así como el exrepresentante de la mexicana en Repsol-. Autrey es un conocido empresario cuyo historial está repleto de deudasy de investigaciones judiciales por fraude fiscal.